Oración. Una mujer hace una oración por todas las víctimas de la bomba atómica en Hiroshima.
Son apenas unas cuantas anotaciones en clave escritas en una hoja de papel amarillento, pero cambiaron el curso de la historia mundial.
Una copia original de la orden de operaciones para arrojar una bomba atómica sobre Hiroshima el 6 de agosto de 1945 es exhibida en el Museo de la Segunda Guerra Mundial, cuyo 70 aniversario se conmemora hoy jueves. El documento es mostrado junto a otros objetos relacionados.
La bomba arrojada en Hiroshima y sus secuelas costaron la vida a aproximadamente 140,000 personas, ayudó a terminar el conflicto más mortífero de la historia y, para bien o para mal, inició la era atómica.
"Para mí, es un atisbo a lo que ocurrió ese día", dijo Kenneth Rendell, fundador del museo privado ubicado en el suburbio Natick de Boston. "La gente común no se percata de cómo sería una de estas misiones; pienso que simplemente humaniza todo".
El simple y desgastado documento ofrece pocos indicios sobre la importancia de la misión. No existe mención directa al Enola Gay, el avión bombardero B-29 desde el cual se arrojó la bomba, ni a la tristemente célebre bomba llamada en código "Little Boy".
Bajo una sección del documento para describir qué tipo de bombas estaría transportando el avión, la orden sólo contiene una palabra: "especial". El Enola Gay sólo aparece listado por su número de identificación, 82, y el apellido de su piloto, Paul Tibbets.
La orden de operaciones es una secuencia básica de actividades para los miembros de la tripulación de los nueve aviones involucrados en el bombardeo, desde cuándo asistir a servicios de oración, cuándo levantarse de la cama, comer, asistir a sesiones informativas y, finalmente, cuándo volar a Japón.
El museo, el cual Rendell estableció en 1999, tiene además una copia de una orden indefinible similar para la bomba atómica arrojada en Nagasaki tres días después, el 9 de agosto. Ese ataque y sus secuelas costaron otras 80,000 vidas, motivando la rendición de Japón días después, el 15 de agosto.
Rendell, quien ha acumulado una cantidad considerable de objetos de la Segunda Guerra Mundial para sum museo, dijo que compró la orden de operaciones hace más de dos décadas a la familia de Jacob Beser, un especialista en radar y electrónica quien fue el único hombre que voló en ambas misiones. Beser falleció en 1992.
Otros objetos en la exhibición también fueron comprados a familiares de miembros de la tripulación.
Por ejemplo, hay algunos objetos personales de Theodore "Dutch" VanKirk, navegante del Enola Gay, quien fue el último sobreviviente de la tripulación en morir, el año pasado a la edad de 93 años. Entre ellos están los audífonos de VanKirk, su Biblia y sextante de navegante, el cual utilizó para establecer el curso a Hiroshima.
Se exhibe además una misiva que escribió a su esposa George Caron, artillero de cola del Enola Gay, sobre el regreso de una misión exitosa.
"Parece ser que nuestra tripulación y aviones hicieron historia o algo", escribió. "Cuando nos permitan escribir sobre ello desde aquí, podré contarte todo al respecto. Nuestra fotografía probablemente estará en todo Estados Unidos antes de que podamos decir algo".
INSTA A TERMINAR CON ARMAS NUCLEARES
Por su parte, el primer ministro nipón, Shinzo Abe, instó ayer a la comunidad internacional a terminar con el armamento nuclear, durante la ceremonia para conmemorar el 70 aniversario del lanzamiento de la bomba atómica contra Hiroshima.
"Hasta ahora no hemos podido llegar a un acuerdo en las reuniones contra la proliferación nuclear, pero en otoño de este año presentaremos una resolución en la Asamblea General de Naciones Unidas", afirmó Abe en su discurso durante la ceremonia.
"Japón, el primer país que sufrió un ataque nuclear de la historia, tiene la responsabilidad de actuar en este sentido", destacó el primer ministro nipón durante el acto, al que asistieron representantes de un centenar de naciones.
Abe está actualmente en el punto de mira después de que su Gobierno haya impulsado una controvertida reinterpretación de su Constitución para promover un papel más activo de las Fuerzas de Auto Defensa (Ejército) a nivel global, lo que acaba con más de seis décadas de pacifismo institucional en Japón.
Asimismo, el primer ministro anunció que Japón "promoverá medidas para el desarme nuclear" durante la cumbre de líderes del G7 que se celebra el año próximo en la localidad costera de Shima (centro del país).
El Ejecutivo nipón también ofrecerá su apoyo a la serie de conferencias sobre paz y desarme nuclear que se celebran cada año en Hiroshima desde finales de agosto y hasta el próximo año, añadió.
"Hoy, cuando se cumplen 70 años del ataque que quitó la vida a tanta gente y convirtió la ciudad en cenizas, siento especialmente la importancia de la paz", afirmó Abe, quien también expresó su pésame a los víctimas y a sus familiares.
La bomba lanzada por un avión estadounidense sobre la ciudad nipona acabó de forma inmediata con la vida de unas 80,000 personas, aunque este número aumentaría hacia finales de 1945, cuando el balance de muertos se elevaba a unos 140,000, y en los años posteriores las víctimas por la radiación sumaron muchas más.
Después del ataque sobre Hiroshima, Estados Unidos lanzó una segunda bomba nuclear el 9 de agosto de 1945 sobre la ciudad de Nagasaki, lo que forzó la capitulación de Japón seis días después y puso fin a la II Guerra Mundial.
MIL
Personas murieron con la bomba en Hiroshima.