Peligro. Los vecinos piden que se limpie el área, aseguran que el dueño del terreno ya dio permiso. (EL SIGLO DE TORREÓN)
Vecinos del fraccionamiento San Alberto de Gómez Palacio denunciaron ayer inseguridad, estancamiento de aguas, intentos de violación y basureros.
Los habitantes del sector señalan que durante algunos meses no contaban con alumbrado público y que fue apenas hace unos días cuando el servicio fue rehabilitado.
Sin embargo, Griselda Lucio Delgado, una de las inconformes, señaló que en la parte trasera de su casa se acumuló una gran cantidad de basura acompañada de agua y maleza.
"Son más de tres meses con este problema, los niños no pueden venir a jugar porque está peligroso, con la inseguridad tampoco se puede pasar por aquí, el dueño del terreno ya dio permiso de que se limpie todo esto, solamente faltan las máquinas para que vengan y retiren lo que se ha juntado", declaró.
En el caso de la acumulación de agua, los colonos argumentan que fue debido a una fuga que se originó hace tiempo.
América Velázquez, otra de las afectadas, indicó que el estancamiento del agua ha dejado varios problemas en la salud de los pequeños.
"Aquí ya tenemos mucho con ese problema, hay mosquitos y a los niños les salen granos en la piel, ya reportamos, pero pues no hacen nada, y luego aquí en la esquina se ponen a asaltar y algunos muchachos se drogan", declaró.
Aseguró que hace tres años algunos sujetos ingresaron a su domicilio para sustraer televisiones, microondas y otros aparatos electrodomésticos.
"No sé como se metieron, pero sacaron todo, después del robo puse unas tarimas en la barda y conseguí un perro", expresó la mujer.
Otra situación que aqueja a un sector de la población es el problema con el drenaje.
"Brota el drenaje, se tapa muy seguido, les hablamos y no vienen, huele muy feo, necesitamos echarle cloro, también necesitamos un bordo porque pasan los carros muy recio y es un peligro para los niños", dijo Guadalupe, una vecina que tiene 2 años viviendo por el sector.
El problema que aqueja a los vecinos se encuentra a la altura de la calle Iglesia de Jerusalén.