La presidenta de la Comisión Especial de Lucha contra la Trata de Personas, Leticia López Landeros, exhortó al presidente Enrique Peña Nieto y al Senado de República, sacar de la congeladora la Ley Federal de Trata, que tipifica como delito la explotación de mujeres con fines reproductivos.
López Landeros precisó que desde diciembre del año pasado y por unanimidad, de todos los partidos políticos representados en la Cámara baja aprobaron esta ley, sin que hasta el momento haya seguido el trámite correspondiente en el Senado de la República.
Durante la presentación del libro “Maternidad Subrogada. Explotación de Mujeres con fines reproductivos”, alertó que en México está creciendo una industria millonaria dedicada a la renta de vientres maternos, para “colocar” bebés con parejas que buscan una madre gestante sustituta, pero con un cúmulo de complicaciones que dejan en la incertidumbre e inseguridad jurídica a todos los que participan en el proceso, pero sobre todo, a la mujer gestante y al bebé.
La legisladora panista advirtió que en zonas indígenas y de alta marginación, es donde el fenómeno está aumentando, de ahí la importancia de la reciente tipificación de la EMFR como delito federal en la recientemente aprobada Ley de Trata de Personas.
"En México, este tipo de práctica es legal sólo en los estados de Tabasco y Sinaloa, donde los costos que se ofrecen por el proceso son muy bajos en relación con otros países; situación que propicia que seamos uno de los destinos más visitados por extranjeros que buscan ser padres", apuntó.
Leticia López detalló que en algunas naciones de Europa, como es el caso de Alemania, sólo han autorizado la adopción de menores, y no han legalizado la renta de vientre materno, por los altos riesgos que conllevan prácticas de esa naturaleza.
El libro editado por la Cámara de Diputados, explica que la maternidad subrogada o la renta de útero, genera dudas en la comunidad jurídica y de defensa de derechos humanos, ya que esta práctica ha abierto las puertas a la explotación de mujeres con fines reproductivos (EMFR), la comercialización de bebés por encargo, tráfico de personas, además de la ruptura de la relación natural entre madre e hijo, de acuerdo con la experiencia documentada en India, Tailandia, Nigeria, Canadá, Estados Unidos, Argentina, Colombia, Guatemala, Perú, entre otras naciones.