Ya en la Comarca Lagunera se está percibiendo el cambio de clima de invierno a primavera, registrándose algunos días con temperaturas superiores a los 25 grados, lo que nos hace recordar el inicio de la temporada de calor, cuando se incrementa el consumo urbano de agua y provoca una mayor exigencia en el servicio de los sistemas de agua potable al disminuir las presiones en las redes de distribución. En algunas áreas de las ciudades de la zona conurbada, donde la presión es baja o el abasto no es continuo, se hace más difícil satisfacer adecuadamente esa demanda, generando una percepción de "escasez".
Cabe destacar que el año pasado el suministro de agua se mejoró sustancialmente en algunas colonias que venían padeciendo deficiencias en años previos, al contar con nuevos pozos y con una operación más eficiente de parte de los sistemas de agua potable, lo que ha creado una percepción de una situación más favorable, aunque quedan pendientes algunas áreas urbanas que requieren de una mayor atención para resolver las deficiencias que todavía prevalecen.
Esperamos que con las acciones que están llevando a cabo los sistemas, se continúe mejorando el suministro para enfrentar las máximas demandas de agua esperadas para esta próxima temporada y para el abasto futuro. En la zona conurbada se cuenta con una amplia infraestructura hidráulica y existe disponibilidad de agua, por lo que no debe ocurrir un desabasto en ninguna colonia.
En cuanto a la calidad del agua es importante mencionar que con la instalación de los filtros antiarsénico se ha avanzado en asegurar el suministro de agua potable. A la fecha se encuentran instalados 10 filtros en Torreón y están en proceso de construcción tres filtros más, proyectándose instalar cuatro filtros adicionales para este año y el próximo. Se ha anunciado por parte de las autoridades que se construirán los filtros necesarios para ofrecer agua de calidad a toda la población de la Comarca Lagunera.
Para la selección de la mejor tecnología para remover el arsénico del agua, el IMTA evaluó 6 tecnologías siguiendo una metodología técnica rigurosa, concluyendo que la más apropiada para esta región es la filtración directa en pozos, cuyas principales ventajas son sus bajos costos y su simplicidad de operación, además de que los residuos que se generan son químicamente estables y se clasifican como no peligrosos.
Con los resultados obtenidos en los primeros filtros instalados en Torreón, se comprobó que la tecnología seleccionada es la adecuada, logrando una calidad de agua mejor que la exigida en la norma, por lo que se tomó la decisión de usar el mismo tipo de sistema para todos los filtros en los municipios del valle de la Comarca Lagunera como una solución regional.
Derivado del cambio en la norma en 2005, se originó la creencia en algunas personas de que el arsénico se ha incrementado al paso de los años, sin embargo, al evaluar los datos de los análisis y estudios realizados por varias dependencias, se concluyó que en los últimos diez años no hay una tendencia a aumentar el contenido de arsénico en el agua de la zona conurbada.
Asimismo, también se valoró objetivamente la suposición de que a mayor profundidad se incrementa el arsénico asumiendo que en el acuífero existen depósitos antiguos con más sales, para lo cual se realizó un análisis de las concentraciones de arsénico a distintas profundidades en los pozos urbanos, determinando que no existe dicho incremento.
Es importante que exijamos que el abasto de agua sea suficiente y de calidad, pero con propuestas de solución que sean factibles. Al mismo tiempo, es necesario evitar planteamientos alarmistas e infundados que provocan preocupación entre la población e influyen negativamente en el arraigo de las personas y empresas en la región, lo que ahuyenta nuevos proyectos de inversión generadores de empleo. Destaquemos la infraestructura de los sistemas y los avances para mejorar el suministro de agua.