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Ya vimos que se casó en 1947, que se fue a México a estudiar y que ya es un gran pintor. En 1955, pintó varios murales en el Hotel Río Nazas de Torreón, como lo describe PACO FERNÁNDEZ TORRES en su artículo que publicó en EL SIGLO DE TORREÓN en diciembre de 1985 y del que tomo los siguientes párrafos:
"¡En el lobby del Hotel Río Nazas, fueron pintados dos murales: en uno se representa la llegada de los evangelistas a esta tierra y en la nebulosa del futuro se vislumbra una ciudad a las márgenes del río. En el otro, un campo de pizca recuerda la época de la siembra del algodón y del trigo como cultivos que se alternaban año con año".
"Dentro, en el comedor, tres murales fueron decorados también. El mayor de ellos representa una estampa de la vida lagunera durante la serenata en la Plaza de Armas e involucra a varios personajes del tiempo destacado en el centro el Ing. José F. Ortiz; en uno de los laterales, está representada la que fuera tradicional Romería de Covadonga y participantes en ella a los señores Aranzábal y Calderón; el otro lateral muestra a cuatro jovencitas de Torreón paseando, teniendo al fondo el recién construido Hotel Río Nazas, inaugurado en 1954".
"En otro tiempo, en el Apolo Palacio, estuvo una bella estampa lagunera llamada "El Lonche de la uva", pero que fue destruido a la muerte de don Demetrio Strimpópulos, dueño del lugar. Esas son las huellas de un artista que a su paso por esta ciudad cumplió con la encomienda decorativa de realizar esos murales: Alberto Ruiz Vela".
A LOS ESTADOS UNIDOS: Con el gran deseo de progresar, empacó su equipaje y se lanzó a la aventura por los Estados Unidos.
Sobre este viaje, escribió el periodista de El Siglo de Torreón, don José de la Parra, lo que sigue: "...Pero con cuantas penalidades y cuántos sacrificios, para recorrer ese camino lleno de espinas que conduce a la cúspide del arte!... Pero se ha forjado y Ruiz Vela es ahora un "PRIVILEGIADO DE LOS DIOSES"... Estuvo en la Florida donde pintó unos murales con temas aztecas en el Hotel Lamar, que han sido elogiados por la crítica del lugar... De ahí pasó a Nueva York, donde visitó los grandes museos de arte pictórico en los que abrevó nuevas enseñanzas y luego pasó a Chicago, donde se le encomendaron otros murales de los que se destacan los realizados en el Hotel del Prado: 3 enormes murales de ocho pies de alto por cuarenta de largo, con TEMAS TAURINOS. En esos murales, está toda la gama de la torería; toda la evolución de ese arte, llevada a cabo con mano firme, maestría, llena del colorido de la propia fiesta brava; la fiesta inolvidable con la figura de Manolete en algunos de sus lances; los deudos del torero, siempre tristes, cuando aquel pelea con la fiera.
"La figura del 'MATAOR', teniendo a su lado los eternos apoderados y al valioso 'mozo de estoques'; la dehesa donde se crían los toros y luego en la plaza, los lances que hacen rugir al público de alegría, de admiración...
"Pero Ruiz Vela tiene que regresar a Chicago en estos días para cumplir su compromiso para realizar nuevos murales, en aquella gran urbe, donde visitó y visitará de nuevo el Museo de Arte y donde ha sido invitado para que exponga sus obras y después, el año entrante... a Europa!... Va a visitar especialmente Francia, su gran Museo de Louvre, donde se conservan las obras más maravillosas de los ases de la pintura y de todas las artes y si le es posible, nos dijo, visitará España!... España, la cuna de la fiesta brava, que también ha sabido interpretar con sus pinceles y la sabiduría que le legara el gran RUANO LLOPIS...".
"Ruiz Vela se mostró sumamente agradecido del señor ROBERT E. LANGFORD, propietario del Hotel del Prado en Chicago, y que se ha convertido en su Mecenas...".
Y para despedirse nos advierte, -el mes entrante, la famosa revista norteamericana 'LIFE', se ocupará de mí... ¡Va a dedicarme algunas de sus páginas. Honor al gran Señor!...".
Yo agradezco a los periodistas don José de la Parra y Paco Fernández Torres, de El Siglo de Torreón, por los datos que cubren este artículo. Descansen en paz. (Fueron mis amigos).
