En Siria. El gobierno de Vladimir Putin buscará dar apoyo militar al gobierno de Assad.
El secretario estadounidense de Defensa Ash Carter habló con su contraparte ruso ayer viernes, el primer paso en las conversaciones militares directas propuestas por Rusia sobre el creciente apoyo militar de Moscú al gobierno sirio contra el grupo Estado Islámico.
La conversación de 50 minutos es la primera que mantienen los jefes de defensa estadounidense y ruso en más de un año, desde la invasión y anexión de Crimea por Rusia.
Washington está desconcertado en cuanto a la respuesta que debe dar al apoyo creciente de Rusia al presidente sirio Basar al Assad, y teme que interfiera con la campaña de la coalición contra los milicianos del Estado Islámico en Siria.
El secretario de prensa del Pentágono, Peter Cook, dijo que Carter y el ministro ruso Serguei Shoigu mantuvieron una conversación constructiva sobre la necesidad de "reducir el conflicto" entre el apoyo ruso y la campaña contra el Estado Islámico.
Según un alto funcionario estadounidense, Shoigu dijo a Carter que las actividades militares crecientes de Rusia son defensivas y cumplen las promesas de Moscú al gobierno de Asad.
El vocero del ministerio de Defensa ruso, mayor general Igor Konashenkov, dijo en un comunicado que "el curso de la conversación ha demostrado que las opiniones de las partes sobre la mayoría de los asuntos en consideración son similares o coincidentes. Los ministros destacaron la restauración de contactos entre los ministerios de defensa de los países y acordaron mantener las consultas".
El funcionario estadounidense, quien habló bajo la condición de anonimato, dijo que Carter y Shoigu hablaron principalmente sobre la lucha contra el Estado Islámico y que Carter pidió una conversación diplomática paralela entre los dos países sobre la manera de llegar a una solución política pacífica en Siria. Estas conversaciones se producen esporádicamente desde 2012, y en las más recientes participó Arabia Saudí.
ESTUDIA ENVÍO DE TROPAS
Rusia estudiaría el envío de fuerzas a combatir en Siria si el gobierno en Damasco lo pide, dijo ayer viernes un vocero del presidente Vladimir Putin.
Dmitry Peskov respondió así a declaraciones del canciller sirio Walid al-Moallem, quien negó que hubiera fuerzas rusas en combate junto con las del gobierno sirio, pero que Damasco pediría ayuda a Moscú si fuese necesario.