Capacitan. Los contadores públicos se actualizan día a día para conocer bien las leyes fiscales. (ARCHIVO)
Pese al año que ha pasado, el Régimen de Incorporación Fiscal (RIF) es muy complicado, por lo que piden los especialistas volver al Régimen de Pequeños Contribuyentes y poner algunos candados para facilitar el cumplimiento de obligaciones fiscales.
Octavio García Aymerich, miembro de la comisión fiscal del Colegio de Contadores Públicos de La Laguna, dijo que continúa la incertidumbre fiscal en varios temas, como lo es el RIF. Explicó que buscando hacerlo un sistema tributario simplificado la autoridad fiscal sigue publicando reglas que buscan aclarar obligaciones, pero que resulta ser un régimen fiscal muy complicado, sobre todo más complicado que uno normal de las actividades empresariales.
Señaló que hay disposiciones difíciles de interpretar, por lo que se consulta con especialistas en la materia y dan tres interpretaciones, situación, dijo, que genera incertidumbre y cada quien cumple con las obligaciones como le entiende.
Precisó que el Gobierno ofrece a los RIF, de entrada, un menor pago de impuestos, sin embargo, ante el incumplimiento de obligaciones también están sujetos a la aplicación de sanciones.
TODO SE COMPLICA
Algunos especialistas han dicho que lo complicado es la inversión en equipo de cómputo y software para el cumplimiento con el fisco, sin embargo, García Aymerich sostiene que es una combinación de esto y la incertidumbre de cómo pagar correctamente.
Dijo que lo simplificado del nuevo régimen fiscal no se le ve, ya que actualmente los RIF han tenido que contratar a un contador público que esté actualizado para que realice el pago correcto y envío de información.
"Es un régimen que es complicado y no tiene nada de simplificado, dado que requiere la contratación de especialistas en la materia, sin considerar que existen diferentes interpretaciones de la misma ley".
Comentó el especialista fiscal que el SAT sostiene que utilizando los programas la declaración sale automáticamente, sin embargo, lo que cuestiona es que el causante ni el contador saben a ciencia cierta qué información se debe meter al programa.
Ejemplificó que el IVA para los RIF no paga una tasa del 16 por ciento, sino que la tasa se establece en base a la actividad que realice. Sin embargo, desconoce si en la factura que se hace al público qué tasa debe aplicar, un 2, un 8 o un 16 por ciento. "El punto no es lo complicado o sencillo de llenar la declaración, sino el punto es cuál y qué información se debe de subir".
García Aymerich concluyó que el problema es la normatividad aplicable con la reforma fiscal. Opinó que con el interés de subir a los pequeños contribuyentes a un régimen sencillo y simple (RIF), en cada una de las adiciones que realiza el SAT a la denominada resolución miscelánea vienen reglas relacionadas a los RIF que sólo generan incertidumbre.
Externó que es momento de diseñar algo tan sencillo como a lo que se tenía cuando operaba el Régimen de Pequeños Contribuyentes. "Es necesario se simplifique el sistema y regresen los Repecos, con algunos candados , para lograr una certidumbre fiscal".