Pierde peso desde tu cerebro
Desde el año 2009, México desplazo a Estados Unidos como el país con el primer lugar a nivel mundial de obesidad. Actualmente, según Jesús Felipe Roldán, director general del Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades (CENAPRECE), siete de cada 10 mexicanos tiene problemas de obesidad.
Ante la posibilidad de que este padecimiento y sus consecuencias se conviertan en una epidemia, se han buscado alternativas que complementen los esfuerzos de una buena nutrición. Es aquí donde entra la hipnosis clínica, que tiene como propósito hacer una reprogramación en el subconsciente para ayudar al paciente con la pérdida de peso.
La doctora Blanca de Ramírez, Psicóloga hipnoterpeuta desde hace 27 años, nos platicó como es que se lleva a cabo el tratamiento y que resultados se pueden esperar.
Una dieta, pero mental
Hay quienes aseguran que la obesidad es resultado de problemas emocionales que no han sido atendidos, por ello, este problema de salud se ha convertido en un objeto de estudio para la psicología.
La hipnosis clínica es una herramienta de la psicología positiva moderna, que permite actuar en el subconsciente para cambiar situaciones negativas a positivas. “La psicología positiva moderna se encarga de reconstruir, ya no es como antes que el paciente salía llorando del consultorio al avivar situaciones negativas”, asegura la doctora de Ramírez.
En el caso particular del sobrepeso, el paciente que decide asistir a un tratamiento de hipnosis, primero es estudiado mediante una serie de preguntas para saber si es apto o no. Sin embargo, este no es un impedimento, ya que se puede trabajar en el para que la hipnosis funcione.
En lo que la hipnoterapeuta define como una dieta mental, se reprograma y trabaja la mente a través de cuatro ámbitos básicos: la fuerza de voluntad, la consciencia, la aberración de alimentos chatarra y el gusto por alimentos nutritivos.
Una vez comenzado el proceso se busca un color con el cual se genere el trance, un estado temporal de consciencia, que se ubica entre la vigilia y el sueño. Dicho color va a estar presente siempre que se quiera conseguir el objetivo de la hipnosis.
“Yo trabajo mucho el color verde, y por ejemplo, el color verde llega al abdomen y pasa por todo el cuerpo haciendo que se baje de peso, talla y volumen”, comenta la hipnoterapeuta.
En la mayoría de tratamientos de hipnosis los resultados son inmediatos, pero en el caso de la obesidad el paciente es tratado a lo largo de un año para observar su proceso.
La doctora Blanca de Ramírez afirma que la hipnosis es “inocua” cuando se realiza de forma profesional, lo cual permite que se pueda realizar desde tempranas edades, “es indicada para pacientes desde cinco años en adelante, con problemas psiquiátricos o comunes como el estrés y la ansiedad”, agrega la hipnoterapeuta.
La hipnosis para otros padecimientos
Con el paso de los años, se han ido desvelando los efectos positivos que tiene la hipnosis para supresión de malos hábitos, pero sobre todo, se ha mostrado la utilidad que puede tener en el tratamiento de padecimientos psiquiátricos, como la depresión.
La doctora Blanca de Ramírez expone como prueba, el caso de uno de sus pacientes con un cuadro depresivo muy grave, “venía muy mal, llorando, pero salió con una sonrisa en la cara al finalizar la consulta”.
Otro de los problemas que puede ser tratado mediante la hipnosis, es el déficit de aprendizaje en los niños. “Han venido jóvenes de 11 años que todavía no saben leer y tienen problemas de concentración. Con la hipnosis yo hago que recuerden las letras, las reconozcan y las junten”, comenta la doctora de Ramírez. Esta también resulta ser una buena opción para cualquier estudiante que deseé mejorar sus capacidades de concentración, retención y asimilación.
Además de la depresión y del déficit de aprendizaje, la hipnosis clínica es recomendada para pacientes que sufren de estrés, angustia, miedos, insomnio, y por supuesto obesidad.
La mente contra el dolor
Seguramente habrás escuchado el gran mito de que los seres humanos sólo utilizamos el 10 por ciento de nuestro cerebro, la verdad es que funciones tan básicas como respirar, en conjunto con otras actividades que realizamos, activan más de un área (es decir, más del 10 por ciento) de nuestro cerebro.
Lo que sí es una realidad irrefutable, es que este órgano tiene la gran capacidad del aprendizaje, y posiblemente de la expansión de neuronas gracias a este hecho. Entonces, ¿qué tan cierto es que la mente es lo más poderoso que hay?
La neurociencia se ha encargado de experimentar y comprobar lo alcances de la mente humana; hasta hace unas semanas se informó de los grandes avances que se tiene en cuanto a la comunicación telepática entre dos individuos, lo que nos hace cuestionarnos aún más sobre lo que no sabemos de este órgano vital.
La psicóloga hipnoterapeuta Blanca de Ramírez, es una fiel creyente y practicante de los poderes de la mente, especialmente para mitigar el dolor. Desde el causado por una pérdida, hasta el provocado por un padecimiento completamente físico, ambos pueden ser disminuidos por medio de la hipnosis clínica según la doctora.
Uno de los grandes ejemplos son los pacientes con quemaduras, los cuales sufren grandes secuelas tras las curaciones, “Son pacientes que si llegan a tener una quemadura, es un trauma quitar piel una y otra vez. A ellos se les quita el dolor físico y se les enseña a que trabajen su dolor”, puntualiza la hipnoterapeuta.
De Ramírez considera que manejar el dolor físico es uno de los máximos de la hipnosis, y espera que este tratamiento, pronto pueda ser reconocido plenamente por el ámbito científico.