Al trabajador de un teatro le pareció completamente divertido echar a perder el trabajo de seis horas continúas de acomodar butacas en una sala de teatro, todo por una simple pero a la vez divertida broma.
Resulta que al empleado se le ocurrió aventar contra las sillas a un actor que se encontraba en pleno ensayo, esto con la finalidad de que provocara una reacción en cadena e hiciera caer una a una las cientos de asientos acomodados perfectamente para presenciar una función.
Y lo más sorprendente de la jugarreta fue que le salió a la perfección, a tal grado que le tomó el lado bueno a su despido tras cometer la fechoría, subiendo el video en forma irónica a través de redes sociales. Ahora es todo un éxito viral.
La sucia jugarreta le salió a la perfección. Hoy ya no tiene trabajo pero disfruta a lo grande de su broma viral. (YOUTUBE)