Si haces un alto en tu camino para reflexionar un momento, podrás visualizar tu vida como un viaje, un peregrinaje hacia el progreso.
El progreso y la madurez que se alcanzan como adultos son bastante diferentes a las experiencias de la niñez. En la escuela se esperaba que pasaras de grado cada año. Cuando empezaste a trabajar, sin embargo, descubriste que los avances no son regulares y precisos.
Mientras que un o una asistente pueda, hasta cierto grado, progresar en su carrera, es inevitable que sea por etapas. Se presentan situaciones en las que hay que esperar y tener paciencia para dar el siguiente paso en el ascenso en el trabajo.
Estos períodos de expectativa son críticos para las personas que están decididas a progresar. Pueden perder la confianza y extraviar su rumbo. Este compás de espera puede afectar negativamente la actitud y la productividad de la persona y cuando esto sucede, los planes para la carrera están en peligro.
La gerencia está consciente de la frustración que sus asistentes sienten cuando los ascensos se detienen temporalmente. Muchos ejecutivos han sentido el mismo desánimo cuando ha habido estos altos en su trayectoria y sienten empatía por ellos en estas situaciones. Pero ningún jefe puede garantizar oportunidades de avances para todo su personal.
La persona que puede vislumbrar lo que su empresa será dentro de cinco años, va un paso adelante de las que no lo hacen. En lugar de destruir un futuro brillante sucumbiendo al pesimismo, ésta puede sobreponerse a los períodos de espera, invirtiendo su tiempo con inteligencia.
Aprovechando las oportunidades disponibles de entrenamiento, te mantendrás ocupado, evitando así el enfrascarte en las indebidas lamentaciones por un futuro incierto. Conservando una actitud positiva en los lapsos de espera, un asistente preocupado por su futuro puede estar seguro que su éxito será una realidad.
Demasiada responsabilidad en una etapa inicial en el trabajo, puede ser dañina. Es mucho mejor avanzar con lentitud y emplear más tiempo en adquirir un buen entrenamiento que te capacitará para asumir la responsabilidad de una buena posición, cuando la oportunidad se presente. El sacar provecho de toda coyuntura que se te ofrezca para aprender, es como invertir para el futuro; los dividendos se te pagarán en proporción a lo que hayas invertido.
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