Potenkiah
Tras conquistar a los voraces y apasionados lectores jóvenes de todo el país por la vía independiente con las dos primeras entregas de lo que sería su la saga Potenkiah, Andrea Saga (Monterrey, 1974) fue fichada por Planeta para convertirse en una de las primeras apuestas con que este sello editorial abre camino para la literatura fantástica en México.
A finales de los ochenta Andrea Saga, una joven lectora compulsiva que cursaba la secundaria, comenzó a imaginar un universo habitado por seres alados, naves espaciales e imponentes escenarios futuristas. A través de los años ese mundo fue tomando forma y de entre sus habitantes comenzaron a surgir personajes que exigían que sus hazañas fuesen contadas. Así fue como un día Andrea no tuvo otra alternativa que pasar al papel la historia de Eloah, la tierra de los “vuela hombres”.
Con su manuscrito en mano, la escritora tocó sin éxito las puertas de diversas editoriales. Estaba convencida, sin embargo, de que los 'eloahnos' no soportarían quedarse guardados en el fondo de algún cajón, de modo que decidió irse por 'la libre'; optó por autopublicarse y aprovechar la gama de oportunidades que ofrece la era digital para promocionar su libro.
Andrea planeó su historia como una saga de cinco volúmenes y publicó el primero de ellos, Potenkiah. La piedra de la muerte, en 2013, seguido de Potenkiah. La batalla por Eloah, que fue lanzado en 2014. Ambos libros, disponibles en formato impreso y digital y distribuidos a través de librerías como Gandhi y Gonvill, así como de la página web de la autora, en todo el país, generaron una oleada de comentarios positivos en la red por parte de blogueros, booktubers (jóvenes que reseñan libros en YouTube) y lectores adheridos a redes como Goodreads. La efervescencia fue tal que al poco tiempo Andrea tenía a la editorial Planeta tocando a su puerta, pues vieron su potencial como producto editorial.
De este acercamiento surgió el acuerdo de publicación de una nueva versión de Potenkiah bajo el sello de Planeta. Los planes de Andrea Saga se modificaron y lo que sería una saga de cinco partes se convirtió en una trilogía. Así, las dos primeras entregas se adaptaron para agruparse bajo el nuevo título de Potenkiah. La profecía, que salió a la venta en este 2015.
“Ellos se acercaron a mí, me contactaron por redes sociales (...) entonces me hicieron esta oferta y yo encantada. Es como que el sueño de todo escritor que de pronto alguien te toque la puerta, como cuando descubren un artista”, comenta la autora.
ELOAHNOS, PROFECÍAS Y CONSPIRACIONES
Potenkiah. La profecía está ambientada en Eloah, un planeta poblado por seres antropomorfos pero con alas. “Yo creo que toda la gente alguna vez ha soñado que vuela, si no pues no haríamos aviones, ni paracaídas, entonces, es un sueño compartido, que qué padre sería volar”, cuenta Andrea Saga al explicar de dónde surgió la idea de su historia.
Se trata de “una sociedad que sí tiene contacto con la humanidad, de hecho tuvo un contacto temprano con la humanidad, un contacto forzado, porque en teoría hasta que no estuvieran listos y no tuvieran su propia tecnología espacial pues no deberían haber hecho contacto con otras civilizaciones, pero los humanos teníamos demasiada prisa para tener este contacto con ellos y fue un contacto forzado. Entonces ellos se brincaron como dos mil años de evolución, de estar en su época de pininos tecnológicos, de pronto ya tenían naves espaciales. Es una sociedad atípica, sale de lo que estamos esperando”, describe la autora.
La historia comienza cuando la joven princesa Bridget Andier pierde a sus padres en un atentado cuyo objetivo a eliminar era ella. El trono de Eloah queda entonces vacío pues ella no ha cumplido la mayoría de edad, de modo que el planeta queda en manos de un regente. Su inmadurez, aunada al dolor de haber perdido a sus padres y el sentimiento de culpa debido a la forma en que sucedieron los acontecimientos no hacen de Bridget una digna heredera de la corona, pero poco a poco su carácter comienza a templarse a la par que crece su interés por los asuntos políticos. En su búsqueda de voz y voto Bridget se aventura a la conquista de Potenkiah, “la Piedra de la Muerte”, una gema que nadie puede tocar sin poner en riesgo su vida. Contra todo pronóstico, la princesa sobrevive, ganándose así el respeto y el lugar que le corresponde en el reino al mismo tiempo que da cumplimiento a una parte de una antigua profecía relacionada con una catástrofe para el pueblo eloahno, la razón por la que un grupo de fanáticos busca eliminarla a toda costa.
NOVELA JUVENIL
La magia y la ciencia ficción, aderezados con un toque de suspenso y novela épica se funden en Potenkiah para dar origen a una historia que fácilmente puede cautivar a los amantes de un género donde caben otros grandes éxitos juveniles que van desde Harry Potter, El señor de los anillos y Juego de tronos, hasta Los juegos del hambre, Divergente y Maze runner.
Aunque aclara que su libro puede ser disfrutado por gente de todas las edades, Andrea Saga reconoce que su público meta está conformado sobre todo por jóvenes. “Se enfocan hacia ellos porque son los principales consumidores de fantasía y ciencia ficción, pero tengo también lectores de mi edad que están fascinados con el personaje, y como tiene mucho suspenso y mucha acción, también les emociona mucho”.
Considera que el género fantástico y de ciencia ficción es muy atractivo para los jóvenes debido a que además despertar su imaginación, ofrece historias entretenidas.
“Generalmente tienen acción, romance, y los problemas que suceden ahí están ajenos a tu realidad inmediata, son como una vía de escape. Desde el momento en que no están ocurriendo en tu colonia, en tu país, ya desde ese momento son los problemas de esos personajes que están en otro lugar en el futuro, no son problemas que te pertenecen, por más que tú te identifiques y sufres con tu personaje es algo de lo que en cualquier momento puedes volver a la realidad y no pasa nada, en cambio literatura muy realista, muy cercana, a tus problemas inmediatos es como más pesada para los jóvenes”, explica.
UN NICHO EDITORIAL
No obstante el éxito en el mercado de este tipo de obras literarias, un escritor dedicado al género no la tiene fácil en nuestro país. Por una parte, los círculos de intelectuales tienden a discriminarlas, sin considerar que sirven como literatura de umbral. “Yo creo que ningún libro que abre las puertas de la lectura a los jóvenes y los convierte en ‘libroadictos’ es un mal libro”, mencionó alguna vez la autora en una presentación de Potenkiah.
Por otra parte, las editoriales mexicanas, aunque conocen el potencial mercantil del género, ignoran a los muchos autores nacionales dedicados a él y prefieren apostarle a la traducción de best sellers o a literatura más “real”.
“(La literatura fantástica) apenas está abriéndose camino. Se consume mucho pero los editores hasta este momento estaban con puras traducciones, con éxito probado en otros países, entonces ya sabían que era una apuesta segura traérselo. Pero tanto se daba que los escritores mexicanos no se atrevían a salirse de los seguro, que era escribir de narcos, como que las editoriales no se atrevían a publicar a los mexicanos”, refiere Saga.
FUENTES DE INSPIRACIÓN
La imaginación de Andrea Saga se nutre de cualquier tipo de literatura, películas o series que reten su imaginación, “ya sea que haya magia, otros mundos, que haya tecnología, que se ambiente en el espacio... mientras me rete la imaginación, sí de pronto leo thrillers, cosas que suceden en la tierra, pero es lo menos, lo mío lo mío es que se me rete la imaginación”.
Entre sus autores favoritos menciona a Brandon Sanderson, Patrick Rothfuss, José Antonio Cotrina y Laura Vallejo.
Twitter: @gsi_k