Autoridades de Minnesota presentaron cargos criminales contra la Arquidiócesis de las ciudades de St. Paul y Minneapolis por el manejo que sus autoridades eclesiásticas dieron al caso de un sacerdote acusado y convicto por pederastia.
El fiscal del condado de Ramsey, John Choi, indicó que aunque la Arquidiócesis no era responsable de los actos cometidos por el ahora exsacerdote Curtis Wehmeyer, ésta falló en proteger a menores de edad y con ello contribuyó al daño que sufrieron.
"La responsabilidad criminal por el daño causado no es sólo de Curtis Wehmeyer, sino también de la Arquidiócesis", reiteró Choi. El fiscal apuntó que los líderes de la Arquidiócesis ignoraron los señalamientos.