Caso. El simulacro se desarrolló con una hipótesis de emergencia por accidente.
En el marco del 17 Curso Nacional de Emergencias Industriales, la tarde del viernes se llevó a cabo un macrosimulacro de derrame de material peligroso, dentro del Bosque Centenario, en Torreón, mismo en el que participaron 150 personas, entre ellas los cuerpos de rescate de la ciudad.
Héctor Solorio Jiménez, gerente de seguridad de Met-Mex Peñoles, informó que dicho simulacro se desarrolló como parte de la clausura del curso, impartido durante tres días y en el que los 400 asistentes de los diversos estados del país, recibieron talleres teóricos y prácticos divididos en seis módulos.
Detalló que dentro del simulacro los participantes (150) desarrollaron las habilidades adquiridas en tres los módulos, como lo son el manejo de materiales peligrosos, comando de incidentes y emergencias de primeros auxilios básico.
Asimismo, informó que como apoyo en el proceso se contó con la participación de Alberto Calderón Núñez, mayor oficial en sanidad, procedente de México, Distrito Federal, quien felicitó a los participantes, ya que se desempeñaron de manera adecuada y bajo el tiempo óptimo de respuesta.
"El objetivo de desarrollar estos simulacros y cursos, es con la finalidad de que los cuerpos de rescate y el mismo personal de la empresa tenga las habilidades necesarias para actuar oportunamente al suscitarse una emergencia real" apuntó Solorio Jiménez.
El simulacro se desarrolló con una hipótesis de emergencia por accidente en transporte de materiales peligrosos, en dos percances.
El primer acto se presentó alrededor de las 5:00 de la tarde, cuando un hombre de aproximadamente 70 años, a bordo de una camioneta acompañado de dos familiares, circulaba por la carretera federal numero 34, con dirección a Guanaceví, Durango; y al manejar a exceso de velocidad perdió el control de su unidad, impactando el costado derecho de un autotanque que en ese momento circulaba por la misma carretera, terminando la pipa que transportaba material peligroso, con una grieta por donde se derramaba el químico, para después terminar la camioneta impactada entre unos árboles próximos a un poblado.
Metros adelante, hay unas vías de ferrocarril, y es donde se registró un segundo accidente, con un carrotanque, el cual se descarrila y comienza a fugarse el dióxido de azufre que transportaba, provocando la intoxicación de los habitantes del pueblo, así como el fallecimiento de dos personas.
Para trabajar el lugar era necesario utilizar trajes especiales, la regadera portátil y una coordinación estricta, a fin de evitar víctimas.
"Aquí es muy importante que el personal de los cuerpos de rescate, como lo son Cruz Roja, Bomberos y Protección Civil, tengan el conocimiento de cómo actuar ante un derrame de material peligroso, ya que no es como cualquier emergencia, puesto que existe la posibilidad de resulten lesionados, sin embargo, con estas actividades les transmitimos los conocimientos necesarios para que se protejan con material especial y desarrollen sus labores de rescate", finalmente comentó uno de los organizadores.