Los legisladores que dictaminaron la Ley Antitaurina se olvidaron de las hazañas de Fermín Espinosa Saucedo, mejor conocido como "Armillita Chico'' o el "Maestro de Maestros'', considerado como uno de los toreros más grandes de todos los tiempos, nacido en la ciudad de Saltillo y descendiente de una familia dedicada a la tauromaquia desde el siglo antepasado.
El caso de Fermín Espinosa "Armilita Chico'', según lo escrito en 1984 por don Alberto A. Bitar: "Fue similar al de muchos grandes hombres, que por lo mismo, por ser lo que fueron, pasaron por modestos, como se les toma cuando la verdad es que son sencillos, humanos, comprensivos y bondadosos, porque ese mismo espíritu que los eleva o los destaca es el que los anima a estar lejos de la soberbia y la vanidad. Ahí, su grandeza''.
Fermín Espinoza Saucedo nació el tres de mayo de 1911 en la ciudad de Saltillo en el barrio del Águila de Oro, descendiente de una familia de toreros, su padre, don Fermín Espinosa Orozco, fue banderillero de toros y zapatero de oficio, su hermano mayor Zenaido fue peón de brega y enseguida Juan destacó primero como novillero y después como matador con alternativa en México y España.
El apodo de "Armillita'' le fue impuesto a don Fermín Espinosa Orozco en 1905 por el torero cubano José Marrero "Cheché'' en la plaza de toros de Chihuahua, quien le dijo que dejara el apodo de "Campanero'' que usaba don Fermín y que adoptara el de "Armillita'', porque su manera de torear y sobre todo de poner las banderillas se parecía mucho al de un torero español que utilizaba ese apodo. Desde aquel año don Fermín fue conocido en las plazas de toros como "Armillita'', siendo el fundador de la larga dinastía que perdura en el ambiente taurino hasta nuestros días.
¿Quién enseñó a torear a Fermín Espinosa hijo? Él siempre dijo que no tuvo maestros, que vio muchas veces a su padre correr a los toros a punta de capote para ayudar al matador y poner banderillas; que después vio hacer lo mismo a su hermano mayor Zenaido y enseguida a Juan como novillero y matador. Usar el capote, la muleta y el estoque lo familiarizó con el oficio, pero su técnica, aplomo, dominio de intuición natural para resolver los problemas de la lidia nacieron con él, que sin saberlo, sabía más de lo que le hubieran podido enseñar, según lo comentó en una ocasión.
Fermín Espinosa "Armillita Chico'' tomó la alternativa a los 16 años de edad y cinco meses, el 23 de octubre de 1927, siendo uno de los matadores de toros más joven que ha existido en nuestro país. La faena a "Maromero'' de la ganadería San Diego fue su doctorado entre ovaciones en el Toreo de la Ciudad de México. En su primera campaña de matador alternó con los ases mayores de la baraja taurina de España, que dieron la medida de su potencial.
Su compadre y gran amigo don Mariano Rodríguez Gil comentó al respecto: "En México se le atacó siempre con el "sanbenito'' de que era un torero fácil, y que traer facilidad al toreo no era gran cosa. Triunfó primero con más impacto en España que en su tierra, decía Fermín, por qué el toro español, era de más fuerza, de más pujanza, requería juna lidia cerebral y de dominio''.
En su gira triunfal por España le tocó participar en la trágica corrida en la que murió el torero sevillano Ignacio Sánchez Mejías, el 11 de agosto de 1934 en Manzanares, España, en la que Ignacio sufrió una tremenda cornada en un muslo, cerca de la ingle derecha en su primer toro de nombre "Granadino'', falleciendo la mañana del martes 13 de agosto de ese año. El poeta Federico García Lorca, amigo personal del torero, le escribió tiempo después el poema denominado Llanto por Ignacio Sánchez Mejías.
Después del boicot de los toreros españoles a los mexicanos en la temporada 1936, Fermín Espinoza "Armillita Chico'' regresó a México, para ese año ya era un maestro consumado, había triunfado en la temporada 1935 en Madrid, Barcelona Valencia, Zaragoza, Santander, Pamplona y Bilbao, España, además en Mont de Marzán, Francia.
A su regreso triunfal a México se integró a un grupo de figuras, como Jesús Solórzano, "El Soldado'' Castro, Lorenzo Garza "El Amo de las Tempestades'' y Silverio Pérez, quienes tuvieron exitosas temporadas a fines de los años treintas, que despertó pasión en los tendidos. Alternó también con Pepe Ortiz, insigne torero, creador de suertes, realizando una faena inolvidable a "Zagalejo''. En su larga carrera de 22 temporadas se enfrentó a otros ases del toreo como Alberto Balderas y Ortega.
Su rivalidad más dura fue con el regiomontano Lorenzo Garza, sosteniendo corridas de mano a mano en 19 ocasiones y en la mayoría de ellas Fermín se llevó el triunfo por delante. En 1935 se inició la competencia entre el torero de Saltillo y el de Monterrey, los dos se le jugaban en el ruedo y la afición ganaba.
En los tendidos había una gran pasión y las mantas de ambos bandos salían a relucir, como aquélla que decía: Para Garza tenemos a "Armillita'', para la Virgen del Roble (Patrona de Monterrey), tenemos al Santo Cristo de la Capilla (Patrono de Saltillo).
Fermín Espinoza "Armillita Chico'' estuvo en activo durante 23 años, se enfrentó a toros de las más diversas ganaderías y castas en los ruedos de cuatro Continentes y nunca se le fue vivo un toro al que su arte taurino no hubiera podido dominar y destaca el hecho de que sólo una vez en su vida fue herido de cierta gravedad por un pitón.
El seis de septiembre de 1978 falleció Fermín Espinoza Saucedo "Armillita Chico'', quien con su brillante trayectoria en la fiesta brava le dio renombre a Saltillo en una época en que no era una ciudad tan importante como en la actualidad, desafortunadamente, los legisladores coahuilenses no tomaron en cuenta las hazañas del "Maestro de Maestros'' y emitieron su ley.
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