Sanitario. El control sanitario se realiza en este grupo considerado de alto riesgo por la naturaleza de la misma actividad.
El regidor panista Nicolás Rangel pidió derecho de réplica a lo publicado en una columna de esta casa editora respecto a su participación en el tema de apoyo a las quejas de sexoservidoras en el municipio de Lerdo.
Como se informó con oportunidad, un grupo de sexoservidoras se acercaron al edil, quien preside a la Comisión de Salud, para solicitar su apoyo en la reducción de costos correspondientes a servicios de control sanitario.
En la columna se publicó que el regidor había olvidado que el costo de los mencionados trámites estaban asentados en la Ley de Ingresos del Municipio establecidos por la Comisión de Hacienda en consenso con la Comisión de Salud.
Ante ello el regidor panista dijo que, tanto él como otros regidores del Partido Acción Nacional (PAN) votaron en contra de la Ley de Ingresos del Municipio con lo que quedó asentada su inconformidad con los recursos que el Ayuntamiento pretende obtener en todos los rubros, entre ellos los que corresponden a los controles sanitarios de las sexoservidoras.
Fue el pasado 20 de enero cuando una comitiva de 20 trabajadoras del sexoservicio que realizan su actividad en el municipio de Lerdo se presentaron en la Presidencia Municipal para expresar algunas peticiones e inconformidades por el costo de requisitos para llevar adecuadamente el control sanitario que deben presentar a las autoridades municipales.
Las quejosas pedían descuento en el costo de exámenes y costo de la tarjeta expedida por Prevención Social, pues ambos conceptos cuestan casi 600 pesos.
Las mujeres fueron atendidas por las autoridades municipales.