El director sociocultural de la Presidencia de Chile, Sebastián Dávalos, hijo de la mandataria Michelle Bachelet, renunció ayer a su cargo tras el escándalo generado por un préstamo de un banco a una empresa de su esposa. "No he cometido ilícito alguno", dijo Dávalos ayer viernes en una declaración pública, en la que no aceptó preguntas, aunque reconoció que la polémica que estalló hace unos días por la operación financiera "ha dañado a la presidenta". "Entiendo el malestar que ha generado esta situación y asumo que el perjuicio provocado ha dañado a la presidenta de la República y al gobierno de Chile, quienes cuentan con mi total y absoluta lealtad", enfatizó Dávalos.