Quejas. Se tienen quejas dentro del Cefereso de Gómez Palacio. (ARCHIVO)
Un grupo de internos del Centro Federal de Reinserción Social (Cefereso) 14, ubicado en la ciudad de Gómez Palacio, inició una huelga de hambre la mañana del viernes en demanda de garantías y el respeto a sus Derechos Humanos.
Familiares de los internos y algunos trabajadores del penal, dieron a conocer a este medio del inicio de esta huelga de hambre sin precisar si la misma la iniciaron todos los internos o la mayoría, pero hasta donde se tiene entendido, el acuerdo era que todos los internos iniciaran esta protesta.
De acuerdo con lo señalado por los familiares, en lo que va del año se han enviado cinco oficios a la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) donde se les ha explicado las condiciones en que se encuentran los mismos internos.
Se les da de desayuno a las seis de la mañana, una taza de té y un pan; de comida, lo equivalente al puño de una mano y de cena, algo similar al desayuno,"esa es la alimentación que se les está proporcionando", comentó la madre de familia de uno de los internos que pidió el anonimato.
Dijo tener miedo porque en los últimos 25 días han fallecido dos internos que presuntamente a los padres les han comentado que son por causas naturales, pero el cuerpo de uno de ellos cuando fue entregado a los padres, presentaba varios golpes en la cara y el rostro.
El pasado miércoles falleció en el mismo penal Ismael Omar Návar Granados, de 22 años, y a los padres les han dicho que fue por causas naturales, pero no les han entregado el cuerpo porque se necesitan 25 mil pesos para trasladarlo al Distrito Federal.
Sin embargo, los familiares dicen que es raro que se estén suscitando estas muertes por causas "naturales", cuando en los últimos meses varios internos se han enfermado por la debilidad de sus cuerpos ante la falta de alimentación, "lo grave es que no tienen medicinas para atender a los enfermos", añadió.
Además, dicen que los mantienen completamente incomunicados y si se les envían cartas se las entregan hasta dos meses después y si ellos mandan alguna misiva, sucede lo mismo: las retrasan dos meses.
"No nos negamos ante el hecho de que en un penal está encerrada gente mala, pero también hay gente inocente, gente que detuvieron y que no han podido demostrar la culpabilidad de lo que se les detuvo y están en proceso, y ésos están siendo afectados al igual que el resto; pero hasta el mayor criminal tiene garantizados en este país sus derechos", enfatizó la madre de familia.
Un padre de familia, pero de un interno de la ciudad de Matamoros, Tamaulipas, dijo que le preocupa lo que sucede con su hijo, porque nadie le ha sabido decir algo sobre esta huelga de hambre que iniciaron desde la mañana del viernes y solicitaba, a través de este medio de comunicación, información sobre lo que se estaba suscitando en el interior del penal.
Lamentablemente ninguna autoridad estatal ha querido hablar sobre esta situación y las federales no pueden hacerlo sin la autorización de la Secretaría de Seguridad Pública en la ciudad de México, ni tampoco permiten la entrada al penal.