El dirigente de la CNC en Madero, José Álvarez Echeribel dijo que los productores de sorgo forrajero están retrasados en los preparativos para el ciclo agrícola del año que entra, ya que por la plaga del pulgón amarillo, quedaron completamente descapitalizados.
Mencionó que incluso algunos han tenido que vender parte de su patrimonio para poder pagar a sus acreedores, pues algunos reportaron pérdidas totales.
El entrevistado mencionó que en Madero se establecieron unas 2 mil hectáreas de ese cultivo y las estimaciones son que alrededor del 80 por ciento de la superficie sembrado se siniestró a causa de la plaga.
La falta de dinero para empezar con los trabajos en la tierra son los altos costos del diésel y la energía eléctrica que consumen las norias, pues en los últimos meses la Comisión Federal de Electricidad (CFE) les está facturando consumos muy elevados, casi al doble de los consumos anteriores.
"Para poder empezar los trabajos se necesita diésel para poder mover la maquinaria y si a eso le agregas lo que se tiene que pagar a la CFE, el costo de la semilla, los fertilizantes y no hay dinero para cubrir todos esos gastos, porque la gente perdió todo por la plaga del pulgón", reiteró.
Álvarez Echeribel dijo que el barbecho de las tierras tiene que empezar en estos meses para cuando llegue la temporada fuerte del frío, las plagas queden expuestas en la tierra y las bajas temperaturas no permiten que éstas se incuben y se reproduzcan.
"El cultivo de sorgo forrajero dejó de ser generoso porque le invertías poco y te daba buenas ganancias. Cosechabas más rápido y te daba una 'lanita'. Levantas dos cortes, con el primero pagabas las deudas y el otro era tu ganancia." finalizó el dirigente de la CNC.