Diferencias. La evaluación docente ha generado división de opiniones entre los involucrados.
Dar a conocer los resultados de la Evaluación de Desempeño con el nombre del maestro divide opiniones.
El INAI, el Tribunal Fiscal Administrativo del DF y diversas organizaciones civiles reclaman que el nombre de los docentes y su resultado de la evaluación debe ser pública.
Los propios maestros, funcionarios de la SEP y el INEE señalan que el resultado es un dato reservado porque solo les atañe a ellos.
Hasta ahora la SEP, tras la aprobación de la reforma educativa, mantiene una política de secrecía en relación a vincular el nombre del docente con el resultado de su evaluación.
Incluso desde que iniciaron los concursos de plazas y de promoción tras la reforma educativa solo se entregan datos agregados y estadísticos, pero no se pueden vincular estos con el nombre, lugar que le fue asignado al docente o la escuela donde trabaja.
En el marco de la Alianza por la Calidad de la Educación que impulsó los Concurso de asignación de plazas, se daban a conocer los nombres de los maestros que aprobaron el examen, el lugar que ocupaban dentro de la lista de prelación, así como la escuela que le fue asignada.
A partir de la publicación de la Ley General del Servicio Profesional Docente, la información sobre el nombre de los docentes a los que se les asignó una plaza, se desconoce, así como los nombres de los maestros que obtuvieron una promoción.
La SEP se ampara en el artículo 79 de la LGSPD que señala que los resultados y recomendaciones individuales que deriven de los procesos de evaluación, serán considerados datos personales.
No obstante, el artículo 65 de la Ley General del Educación, reformado al mismo tiempo que se creó la LGSPD, establece que los padres de familia tienen derecho a conocer la capacidad profesional de la planta docente, así como el resultado de las evaluaciones realizadas.
El Instituto Nacional de Acceso a la Información (INAI) fijó un criterio el pasado mes de noviembre y estableció que si bien la asociación del nombre del docente evaluado con sus respectivos resultados, envuelven la naturaleza de datos personales, también es cierto que envuelven una relevancia pública y por ello este tipo de información no debe ser susceptible de confidencialidad.
En tanto la presidenta del INEE, Sylvia Schmelkes, aseguró que los resultados de la evaluación de los maestros deben ser datos reservados.
"Son datos enteramente individualizados y el resultado de dar datos individualizados sí puede resultar en estigmatizar a los maestros", expresó.
La funcionaria aseguró que para los maestros es mucho más amenazante una evaluación donde sus datos se van a hacer públicos, su nombre con su calificación.
Por su parte Marco Fernández, investigador del Tecnológico de Monterrey, aseguró que los maestros son funcionarios públicos y se requiere conocer qué tan bien preparados están y requieren rendir cuentas.