De regreso. Un grupo de mujeres refugiadas con sus hijos regresa al ver que se bloqueó la entrada a Eslovenia.
Funcionarios de Defensa de Estados Unidos y Rusia firmaron ayer un acuerdo para que sus aviones eviten incidentes en Siria, anunció el Pentágono.
El portavoz del Departamento de Defensa, Peter Cook, anunció en una rueda de prensa que este "Memorando de Entendimiento" establece protocolos de actuación para evitar incidentes, pero no significa que ambas naciones vayan a cooperar o compartir información.
Estados Unidos no apoya los objetivos de los bombardeos rusos, que se iniciaron a finales del pasado mes y que están atacando a todo tipo de oposición al líder sirio Bachar al Assad, a quien EUquiere ver fuera del poder.
El acuerdo, que incluye también protocolos para drones, llega tras varios intercambios y negociaciones entre funcionarios de Defensa de Moscú y Washington por videoconferencia para limitar los riesgos de incidentes.
Ambos países acuerdan desde ayer rutinas de comunicación entre pilotos de sus Fuerzas Aéreas para evitar choques indeseados, mientras que se mantienen vías de comunicación en tierra por si la primera opción resulta infructuosa.
"Este acuerdo hace que haya menos posibilidades de fallos de comunicación", explicó Cook, quien reiteró en varias ocasiones que el acuerdo no significa que el Pentágono comparta la estrategia rusa.
El memorando también establece protocolos de actuación si se produce un incidente aéreo, como el derribo de una aeronave pilotada o un dron.
Rusia está operando decenas de cazas en Siria desde finales de septiembre, al tiempo que ha realizado bombardeos con misiles crucero desde el Mar Caspio con la intención de dar un giro a la guerra civil siria.
El presidente ruso, Vladímir Putin, está apoyando a Al Assad con ataques a grupos como los yihadistas suníes del Estado Islámico (EI), así como a otros grupos moderados apoyados por Estados Unidos.
Estados Unidos opera a diario vuelos sobre Siria desde hace un año, cuando comenzó a liderar una misión multinacional para acabar con el EI en ese país e Irak.
Desde que Rusia empezó a operar en la zona, cazas estadounidenses han tenido que realizar maniobras para evitar elevar el riesgo de encontronazo con los rusos.
Ayer al menos diecinueve personas murieron ayer martes por varios bombardeos en la periferia de Damasco y en la provincia septentrional siria de Idleb, informó esta noche el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
De esos fallecidos, al menos trece perdieron la vida en un ataque de la aviación militar rusa contra la zona de un hospital en el pueblo de Sarmin en Idleb.
Según la ONG, entre los muertos hay miembros de la Defensa Civil, un fisioterapeuta y un guardia del centro sanitario.
Por otro lado, al menos seis personas perecieron y otras treinta fueron heridas por bombardeos de aviones de guerra, cuyo origen el Observatorio no precisó.
Bloquea Eslovenia flujo de regufiados
Eslovenia ha desplegado al Ejército para reforzar el control de sus fronteras y solicitó la ayuda de la Unión Europea (UE) después de que el pequeño país balcánico se haya visto desbordado por la llegada de casi 20,000 refugiados en los últimos cuatro días.
"Eslovenia pide a los países miembros de la UE y a las instituciones europeas que tomen parte activa en afrontar este peso de magnitud desproporcionada para nuestro Estado", señaló el Gobierno del centrista Miro Cerar. Este país de dos millones de habitantes ha agotado su capacidad para acoger y atender a los miles de refugiados que han entrado en su territorio después de que Hungría sellase su frontera con Croacia el pasado sábado.
Según fuentes oficiales, unos 19,500 inmigrantes y refugiados han llegado al país desde esa fecha. Eslovenia ha tratado de limitar el flujo de llegadas, lo que ha provocado un efecto dominó con congestiones en el paso de refugiados en otras fronteras, como la de Serbia con Croacia. Además de la movilización del Ejército, las autoridades eslovenas no descartan otro tipo de "medidas físicas" para mejorar el control de las entradas, aunque erigir una valla a los largo de sus 670 kilómetros de frontera con Croacia se antoja imposible. Entretanto, miles de refugiados han pasado la noche bajo la lluvia y el frío esperando a que se les permita el paso desde Serbia a Croacia y desde este país a Eslovenia, dos fronteras que sufren aglomeraciones en la ruta que siguen los migrantes hacia Alemania y otros países de Europa Occidental.
PERSONAS
Murieron en un bombardeo en Damasco