Fallas. Aunque son evidentes, no admiten fallas.
Para el alcalde de Torreón, Miguel Riquelme, son válidas las críticas emitidas por la oposición, contra la empresa que supervisa externamente los trabajos de instalación del nuevo alumbrado público de la ciudad. "Son válidos esos comentarios, pero la empresa está haciendo su trabajo'', expresó.
Riquelme argumentó que la supervisora externa no es la instaladora de los nuevos equipos, sólo supervisa el tipo de trabajos y la calidad de la instalación.
Respecto a las facultades de ésta, de acuerdo con el contrato, aseguró que no tiene elementos para detener una obra. La labor de la empresa supervisora es vigilar la manera como se desarrolla el trabajo y "darnos a nosotros información del proceso para hacer los señalamientos correspondientes a la concesionaria de haber irregularidades".