Recordé cuando, en una sala de abordaje del aeropuerto de León, Guanajuato, platiqué con Juan Domingo Argüelles. Lo admiro y lo aprecio de manera especial. Él es escritor y mago. Aplaudo sus textos sobre la renuencia a la lectura porque él logra precisamente lo contrario: que lo leamos. Que lo disfrutemos. Que aprendamos. Yo he pasado el ojo por un puñado de ensayos académicos y artículos arbitrados sobre el problema de la lectoescritura y lejos están de provocar una emoción para motivar a un lector a buscar un textito siquiera o a entrar sin alergia a una librería. Juan Domingo tiene ese don al escribir.
Si con esa manera de narrar Juan Domingo genera tal confianza, pues con su charla una se siente encanchada. Será por eso que le confié una intimidad sin temor al rechazo. Le hablé no de mi disgusto, sino de mi traumática y profunda repulsión al futbol. El tema brincó porque del avión que nos llevaría a la Ciudad de México bajó el equipo de fut de León. Desconozco nombres de sus integrantes, colores, logotipo. No tengo referencia alguna.
De un pasillo aparecieron los jugadores. Un dineral en materia de pasajes de avión. Todos esos rostros eran anónimos para mí. Los "me regalas una foto" y los "me das un autógrafo" comenzaron a provocar lentitud en el flujo de pasajeros. Juan Domingo y yo veíamos la escena. "Seguro que por no gustarme el fut, como por tantas otras rarezas mías, nunca fui un buen partido", le comenté.
Juan Domingo escuchó respetuoso mi exposición de motivos contra el futbol. Después, tomó el balón. Me contó que un buen día tuvo la intención de encontrar a académicos, artistas, investigadores, a los que no les gustara el fut. Quería publicar sus entrevistas en la revista IBERO, donde él es director editorial. "¿Sabes? Ni uno solo me dijo odiar por completo al futbol. Algunos opinaron con más o menos coraje, pero todos le rescataron algo".
Pasaron las semanas y Juan Domingo me envió la liga a la edición digital de su texto: "Futbol e intelecto: ¿se pierde la cabeza por un balón?" (http://www.ibero.mx/revistaibero/). Resumo y cito, pero lo mejor es leerlo enterito:
1. "Jorge Luis Borges dijo: 'Es increíble cómo una cultura que se desarrollaba con juegos como el ajedrez, haya degenerado a juegos tan vulgares como el futbol'".
2. "Fernando Savater asegura que este deporte es su calvario cada cuatro años, con cada Campeonato Mundial. Y explica su fobia: Cuando el rey Lear quiere mostrar su máximo desprecio por alguien lo insulta así: '¡Tú, vil futbolista!' (acto I, escena 4). Yo en cambio le escupiría: '¡Vil espectador de futbol!' Porque jugar al futbol es un ejercicio grotesco y plebeyo. (…) Lo que suele llamarse eufemísticamente 'la masa enfervorizada' -en realidad, una piara de lunáticos maleducados poseídos por el síndrome patriotero- se entrega al estruendo y la furia hasta extremos que habrían hecho a Macbeth añorar la amable compañía de las brujas. Lo más insoportable son los cantos, los ripios, los 'oé, oé, oé'".
3. "El gran poeta chileno Gonzalo Rojas trasladó su fobia a un poema (futbol sin parar) en cuyos versos dice, entre otras cosas: 'todo lo futbolero, pelotas y patas,/ se jerarquiza hasta la cresta/ del Aconcagua: ¿metáfora/ de patear por patear, o exhibición/ de cuero del Testículo/ en el césped hinchado.../ Pensar/ que hubo toreros, gladiadores/ en la apuesta, y ritmo./ Píndaro/ hubiera llorado'".
4. "En la búsqueda de antifutboleros ilustres, lo mismo nos podemos topar con Borges que con Kipling, con Umberto Eco que con Álvaro Mutis. También con George Orwell, Carlos Monsiváis y Fernando Vallejo, entre otros. Este último lamenta 'tener un país pendiente de unos tarados que le dan patadas a un balón y que ganan fortunas, mientras los otros les llenan los estadios de gente analfabeta, ignorante, con unos sueldos de hambre', para luego añadir: 'Si alguien juega futbol que lo juegue, pero como espectáculo es grotesco, degradante'".
5. "Javier Llopis, periodista español, ha escrito: 'Los tipos que gobiernan España nos quitan el pan, a base de recortes e impuestos, y nos piden que nos apañemos con el circo futbolero'".
6. "Román Gubern, por su parte, asegura que 'el futbol te vuelve acrítico y hace que quedes en manos de tus pasiones, que acaban por dominarte'".
7. "Borges dijo: 'El futbol es popular porque la estupidez es popular'".
8. "Rudyard Kipling, por su parte, mostró su desdén por el futbol al referirse a 'las almas pequeñas que pueden ser saciadas por los embarrados idiotas que lo juegan'".
9. "Alejandro Jodorowsky se suma a ese desdén cuando dice que 'el futbol satisface el espíritu competitivo de los hombres de conciencia poco desarrollada'".
Los interlocutores del mundo académico seleccionados por Juan Domingo le respondieron qué opinión tenían de las citas arriba enlistadas y qué opinión tenían sobre el futbol. El resultado, interesantísimo. Un partidazo, sin duda. El primero que disfruto por completo.
PARA LEER A JUAN DOMINGO ARGÜELLES: Sus libros circulan, a cancha abierta, por las librerías de la localidad: "¿Qué leen los que no leen?". (Paidós, 2003), "Leer es un camino" (Paidós, 2004), "Historias de lecturas y lectores" (Paidós, 2005), "Ustedes que leen. Controversias y mandatos sobre el libro y la lectura" (Océano, 2006), "Antimanual para lectores y promotores del libro y la lectura" (Océano, 2008), "Del libro, con el libro, por el libro... pero más allá del libro" (Ediciones del Ermitaño, 2008), "Si quieres... lee. Contra la obligación de leer y otras utopías lectoras" (Fórcola, Madrid, 2009).
@RenataChapa
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