Postura. Taylor se había lanzado contra Apple por no pagar derechos a los músicos durante el periodo de pruebas.
Taylor Swift autorizará a Apple Music trasmitir por internet su álbum 1989, el único servicio de streaming que tiene permitido difundirlo.
En un mensaje por Twitter, la cantante informó que después de que Apple decidió pagar derechos a los artistas durante la prueba gratuita del servicio de música por internet de Apple, "decidí poner 1989 en Apple Music... y con gusto".
El representante de la cantante confirmó los tuits.
Swift escribió un mensaje crítico el domingo en Tumblr sobre la decisión inicial de Apple de no pagar a los artistas durante la prueba gratuita, la cual comienza el martes. Posteriormente, Apple cambió de decisión.
Swift ha retirado este álbum de otros servicios de streaming.
En Twitter escribió: "Esta es simplemente la primera vez que siento deseo de transmitir un álbum por streaming".
Agregó que "en caso de que se pregunten si este es algún acuerdo exclusivo con Apple como con otros artistas, no lo es".
Otras voces
Taylor Swift no es la primera en alzar la voz por los derechos de los artistas ante las reglas de este tipo de compañías.
Thom Yorke, el vocalista de la banda inglesa Radiohead, por ejemplo, aseguró en su momento que Spotify perjudica a los artistas emergentes, ya que "millones de reproducciones producen muy pocos miles de dólares".
Y algo similar declaró el líder de Placebo, el luxemburgués Brian Molko. Después de que ambos músicos llamaran al boicot de la plataforma, en julio de 2013 el sindicato de músicos de Reino Unido, con más de 30,000 afiliados, exigió mejores condiciones para los artistas.
Concretamente pedía a Spotify "un modelo de royalties o regalías como el de la BBC y las emisoras comerciales".
Pero su petición no tuvo mayor eco. Y la maniobra más reciente fue la de un grupo de artistas liderado por Jay-Z.
El rapero estadounidense, aliado con personalidades de la talla de Beyoncé, Madonna, Rihanna, Kanye West, Daft Punk o Alicia Keys, y con el apoyo de grandes discográficas como Sony, Universal y Warner, lanzó Tidal, un ambicioso servicio de música en streaming de pago.