Brady mostró un temple característico de su ídolo, Montana, en el partido de ayer. (EFE)
El mariscal de campo de Patriotas de Nueva Inglaterra, Tom Brady, impuso un récord en su posición con su sexto inicio de Super Tazón ayer ante Halcones Marinos de Seattle.
El quarterback de los "Pats" arrancó las ediciones XXXVI, XXXVIII, XXXIX, XLII, XLVI y ahora la XLIX, hasta el momento con saldo de 3-2.
Esta marca implicó que apareció en un "Juego Grande" con 13 años de distancia (2001) y en este duelo sumó su cuarto anillo para igualar lo conseguido por Joe Montana (49's de San Francisco) y Terry Bradshaw (Acereros). Para darle vida a Patriotas de Nueva Inglaterra, su quarterback, Tom Brady, conectó su doceavo envío a las diagonales en juegos de Super Tazón, para colocarse como el hombre con más pases de anotación en la historia del "Juego Grande".
Con tiro de cuatro yardas a su receptor Danny Amendola, el mariscal de los "Pats" dejó atrás a Joe Montana (49's de San Francisco) para fijar un nuevo registro en la NFL.
Brady no se dio por bien servido y jugadas después llegó a los 35 completos, para superar los 34 que Peyton Manning logró el año pasado con Broncos de Denver.
La anotación además le dio al veterano pasador su tercer Super Tazón con una tripleta de envíos de touchdown y dejó a los suyos a sólo tres puntos de distancia de Halcones Marinos de Seattle, quienes lideran 24-21 cuando faltan poco más de cuatro minutos para el fin de esta edición XLIX.
Ayer, en el momento crucial del partido, Brady mostró el temple característico de Montana. Completó con Danny Amendola un pase de cuatro yardas hasta la zona prometida, con unos ocho minutos por jugar. Así, Brady llegó a 12 pases de anotación en el Super Bowl, con lo que quebró la marca impuesta por Montana.
Y cuando faltaban 2:02 minutos por disputarse, Brady conectó un envío de tres yardas con Julian Edelman, para que los Pats tomaran la ventaja. El mariscal de campo volteó hacia la banda, señaló hacia sus compañeros en el banquillo y luego alzó el puño derecho.
Pero luego vino la tensión al límite. No fue sino hasta que Butler interceptó un pase de Russell Wilson que Brady pudo celebrar.
Saltó como un niño en un costado del terreno, y abrazó efusivamente al entrenador Bill Belichick.
Ahora Brady, Montana y Terry Bradshaw, de los Steelers de Pittsburgh, son los únicos quarterbacks titulares con cuatro cetros del Super Bowl.
