Avance. Los rebeldes señalaron que su avance deja entrever el fracaso de la intervención árabe.
Rebeldes chiítas houthis tomaron ayer el palacio presidencial de la disputada ciudad de Aden, sur de Yemen, tras horas de intensos combates con las fuerzas gubernamentales leales al presidente Abdu Rabu Mansur Hadi, quien huyó a Arabia Saudita. Pese a los bombardeos lanzados por la coalición de diez países árabes contra los houthis, los rebeldes lograron ingresar ayer jueves al centro de la portuaria ciudad de Aden y tomar el control del complejo de gobierno, donde se recluyó el presidente Hadi hasta la semana pasada.
La milicia houthi tomó en septiembre pasado el control de los medios estatales y edificios gubernamentales en Saná, incluida la sede de la Inteligencia, obligando al mandatario yemenita a huir a Aden, desde donde gobernó hasta la semana pasada, cuando llegaron los rebeldes. Funcionarios de seguridad yemenitas confirmaron que el Palacio de Maasheeq de Aden, un conjunto de villas de la época colonial, está en poder de los rebeldes, que lograron hacer retroceder a las tropas de Hadi, luego de intensos combates que dejaron al menos 46 muertos.
"Los rebeldes y sus aliados han capturado el palacio presidencial en Aden", indicó un funcionario de seguridad, en referencia a las tropas del Ejército leales al ex presidente Ali Abdullah Saleh, que apoyan la lucha de los houthis contra Hadi. Un portavoz de los rebeldes houthis, una secta chiíta zaidí que representa casi el 30 por ciento de la población de Yemen, declaró su victoria en Aden y afirmó que la toma del gobierno demuestra el fracaso de la intervención militar árabe.