Se puede decir que a los Diablos Rojos les ha ido bien al llegar el momento de reemplazar al legendario "Borrego" Sandoval que hizo historia en la Liga Mexicana y que estará en el Salón de la Fama cuando como el Ave Fénix, el templo de inmortales vuelva a surgir. Hace un año ganaron el campeonato con Juan Carlos Gamboa en las paradas cortas y este año alternaron al mismo jugador con Jesús López, que venía de una operación, y hasta Ramón Urías en unos juegos hizo un gran trabajo defensivo allí.
Gamboa se convirtió en un Súper Héroe del 2014 con los batazos importantes en los play offs y aunque en el 2015 tuvo un buen año esperaba mucho más de él. Creo que tiene el talento para ser una gran estrella como Sandoval pero no ha mejorado totalmente en requisitos para un shortstop, como el tener un tiro certero a primera base de marca registrada. Muchas veces el primera base salva a los infielders al ser un genio de la defensa, como el caso de Mark Teixeira del Yanquis que es una maravilla en la inicial.
Había un viejo dicho que contaba que "cualquiera podía jugar la primera base" y al que tenía problemas defensivos en otras posiciones lo colocaban en la inicial. Sin embargo no cualquiera puede jugar muy bien la primera base.
Los Yanquis pensaban lo mismo que los Diablos pero con Derek Jeter en lugar del "Borrego"... Gregorius fue elegido como su heredero y el joven holandés, aunque ha mejorado una barbaridad desde los primeros meses que era un cero a la izquierda, Didi no parece tener el carisma de Jeter. En ese aspecto luce imposible reemplazar a jugadores que han dejado tanta huella, tanta imagen como Sandoval y Jeter.
Pero de repente Yanquis se encontró que no sólo tenían que reemplazar a Jeter sino a Robinson Canó que se les fue a Seattle por 240 millones de dólares. Canó no ha sido ni va a ser la gran estrella que era con Yanquis. El pelotero necesita el entorno debido y el equipo adecuado para alcanzar la fama.
Ahora los Yanquis están comentando que en las Menores tienen otro infielder dominicano, Jorge Mateo, que con el tiempo podría ser un nuevo Canó. Hasta ahora ha jugado las paradas cortas en las Menores pero los buscadores dicen que a la larga, la segunda base va a ser su posición perfecta. Como el caso de Kiko Castro.
En el Diablos también tuvieron que reemplazar a Daniel Fernández y por el jardín central vimos por un tiempo a los muy buenos Eduardo Arredondo y Leo Heras, pero ahora el heredero se llama Carlos Figueroa que ya lleva dos muy buenas temporadas con los Diablos y trabajando mucho para poder mejorar en ciertas jugadas que exige el Beisbol como es el perseguir los texas bombeados.
Aquel formidable Manuel Ponce, brillante jardinero central de Mexicali que jugó con el Tigres, era un fenómeno en los batazos profundos o de lado, pero llegó a tener su problema en los elevados cortos.
Actualmente con tanta sucursal es más fácil estar listo para reemplazar a una gran estrella al llegar la hora señalada.