Creo que nunca se han visto unos play offs de tantos errores de las dos clases, los normales y los mentales. Los Rangers perdieron el juego decisivo por tres errores en forma consecutiva en el cierre de la séptima entrada. Tres errores en el infield para perder la serie y que sirvieron para aplacar al público de Toronto que en la parte alta de la séptima perdió la ecuanimidad y comenzaron a tirar al campo lo que tenían a la mano cuando se suscitó aquella jugada del cátcher Russell Martin que fue quien comenzó el desfile de mal beisbol con esa jugada que "nunca" se había visto.
Los Rangers tenían en tercera la carrera del desempate y en esas condiciones un cátcher no puede exponerse a un tiro malo cuando devuelve la pelota al pitcher.
Usted se fijó que Martin ni siquiera se paró de su posición habitual de receptor para hacer el tiro de regreso al lanzador, luego tiró de lado del brazo y la pelota le pegó al bat del bateador que estaba en su cajón.
La pelota regresada le dio a parte del bat y se desvió como si fuera una rola por tercera, anotando el corredor de le antesala, el astuto Odor, que sorprendido y todo se dio cuenta de la oportunidad de anotar. Enseguida otra equivocación cuando el veterano ampayer de home dictaminó que la pelota estaba muerta pero después de muchas consultas y telefonazos con el centro de Nueva York en donde deciden las jugadas protestadas viendo las repeticiones... entonces cambiaron la jugada y dan la carrera por buena y los Rangers ya están arriba por la pereza del catcher de no pararse para hacer su tiro al pitcher ya que había hombre en tercera. En esas condiciones hasta un infielder se acercaba al pitcher por si el receptor hacía un tiro malo y al lanzador se le iba la pelota.
Y al cambiar la decisión de bola muerta a bola viva viene la rebelión de los aficionados en que se temió que podía suceder algo bastante malo.
Todavía los fans estaban indignados cuando llegaron los tres errores y el jonrón de José Bautista y cambió el ambiente.
Pero lo del Dodgers es terrible. Iban ganando 2-1 el decisivo cuando ponen una formación especial contra el zurdo Duda y nadie se queda en la tercera base.
Entonces vino pasaporte y cuando el corredor que va de primera a segunda ve que no hay nadie en la tercera base, sigue para allá. ¿Quién tuvo la culpa? El pitcher Zack Greinke dijo que alguien debió cubrir la tercera al momento que se completó la base por bolas y el que estaba más cerca lo era el propio lanzador. El mánager Don Mattingly puso a jugar un short novato que debió regresar pronto hacia su posición ya que el tercera base andaba por el jardín derecho. El catcher pudo haberse dado cuenta. Le marcaron robo a Daniel Murphy que luego daría el jonrón del gane, pero tiene que ser un error de alguien. Como después vino un elevado de sacrificio esa carrera regalada le costó el juego y la serie a LA ya que sin la marfilada el juego iría 2 a-2 al acabar el noveno.
El diablo anda suelto.
