Festinada a los cuatro vientos, espectaculares, mantas, videos, impresos, calcomanías, como el gran "logro" del Partido Verde Ecologista; reivindicada por el director general del Instituto Mexicano del Seguro Social, José Antonio González Anaya, como antídoto frente al desabasto, la puesta en escena de los vales de medicinas le costará carísimo al país.
Estamos hablando de la posibilidad de que un derechohabiente sin opción de abasto normal acuda a una farmacia a surtir la medicina prescrita por un médico del organismo.
La alternativa planteada originalmente en campaña por el presidente Enrique Peña Nieto está vigente desde hace mes y medio.
De acuerdo con el cálculo del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), el esquema le costará al país al menos 30 mil millones de pesos, en caso de generalizarse.
La advertencia se había colocado en la mesa antes de abrirse la ruta: "Una política de vales abierta implicaría, bajo una estimación muy conservadora, un costo adicional para el sector público de por lo menos 30 mil millones de pesos, adicionales a los 30 mil que hoy compra, de abastecerse a nivel de farmacias privadas todos los medicamentos genéricos que actualmente adquiere".
Y más: "El abasto de medicamentos para toda la población a un nivel similar al que hoy tienen las instituciones de seguridad social (con genéricos y medicinas de patente) tendría una exposición al riesgo máximo de 150 mil millones de pesos".
El rey de las farmacias de medicinas genéricas, similares y conexas se llama Víctor González Torres, hermano de Jorge, fundador del Partido Verde Ecologista y tío del eterno legislador Jorge Emilio González, conocido como "El Niño Verde".
De acuerdo con el Coneval, el mercado de medicamentos en el país vale 190.9 mil millones de pesos al año, de los cuales el sector público gasta aproximadamente 60 mil -la mitad para genéricos-, vía dos mecanismos: Compra por pieza y provisión integral de distribución y abasto.
El resto del mercado tiene una mezcla de genéricos intercambiables, genéricos de marca y medicamentos de patente.
El estudio (Política de medicamentos) señala que el precio de venta de un medicamento genérico en farmacias equivale al doble del que se ofrece al sector público, dados los costos de comercialización de los fabricantes por los diferentes canales y los márgenes de distribución y venta al público.
La cadena de suministro, es decir, producción, dispensación y uso, tiene varias etapas, desde la compra, la distribución primaria (fabricante/distribuidor entrega en almacenes del proveedor de servicios de salud), distribución en punto de servicio, prescripción y aplicación.
Cortar ésta podría derivar en mayores costos, ineficacia y corrupción.
Más allá, el Coneval señala que el valor potencial del abasto de medicamentos que debería proporcionar el sector público está fijado tanto por lo que hoy compran las instituciones de salud y seguridad social, como por lo que actualmente compran los pacientes en el mercado privado.
Una política integral de abasto de medicamentos similar a la actual, para toda la población, agrega el documento, costaría aproximadamente (a precios de compra del sector público) 78 mil 330 millones de pesos, es decir, 18 mil 330 millones de pesos adicionales.
Bajo la ruta, advertía el Coneval que la estrategia de precios de venta entre canales incentivaría el desabasto intencional del sector público con la consiguiente compra directa fuera de licitación o bajo la figura de servicios integrales.
La alfombra, pues, está tendida para que lo que en el papel sería una excepción se vuelva catarata en la posibilidad de contubernio entre funcionarios y detallistas.
La advertencia se la llevó el viento.
BALANCE GENERAL
Colocada la lupa del Instituto Federal de Telecomunicaciones sobre la posibilidad de que la escisión de América Móvil del negocio de arrendamiento de sus torres de telecomunicaciones, creando una empresa de capital mixto, se vuelve a colocar en la mesa la exigencia de que la firma venda algunos de sus activos para sacudirse la condición de predominante.
Sin embargo, la compañía estelar del magnate Carlos Slim no tiene prisa.
La urgencia se congeló a la llegada de la AT&T de Estados Unidos, cuyo potencial técnico es superior al de la compañía mexicana.
Como usted sabe, América Móvil había señalado que la infraestructura, en paralelo a un segmento de su cartera de clientes, se le vendería a una empresa multinacional con capacidad de inversión para equilibrar el mercado, lo que apuntaba a la propia AT&T, su antiguo socio. Sin embargo, la firma decidió navegar por su cuenta al comprar Iusacell y Nextel.
DÍA “D”
El 20 del mes que corre vence el plazo que el juez del concurso mercantil de Oceanografía le concedió a los acreedores de la firma para plantear un esquema de reestructura con opción de asumir el control.
De no darse el paso, la contratista de Pemex sería declarada en quiebra.
En un primer escenario los fondos de que adquirieron papeles de deuda de la empresa han planteado la posibilidad de capitalizarla con mil millones de dólares.
El problema es que se llegue a un arreglo con las empresas arrendadoras de los barcos con que operaba la compañía para que éstos sean reintegrados a la flota.
El reloj está corriendo.
DÍA “D”
Aunque mantiene vivos contratos adjudicados a finales del año pasado y principios de éste, la constructora OHL no tuvo un buen primer trimestre del año. Sus ingresos cayeron 23%, para ubicarse en 3 mil 134 millones de pesos.
En contraparte, su flujo por concepto de casetas de peaje se incrementó 25%, para llegar a 72 millones.
La empresa encabezada por José Andrés de Oteyza está modificando su estructura corporativa. Su mira se ubica en los contratos para la construcción del nuevo aeropuerto de la ciudad de México.
AIRBUS VUELA
En alianza con Aeropuertos y Servicios Auxiliares, la filial en México de la francesa Airbus Group está construyendo un Centro de Entrenamiento para Pilotos.
La empresa fue una de las más activas participantes en la Feria Aeroespacial México, presentando un modelo de avión para transporte militar, equipado para acciones humanitarias.
La firma acaba de crear una fundación para ofrecer aviones, helicópteros y hospitales móviles, además de personal especializado en caso de desastres.
AXTEL CRECE
Con un millón 511 mil unidades generadoras de ingresos, la empresa de telecomunicaciones Axtel logró facturar al primer trimestre del año 10 mil 597 millones de pesos.
La firma con sede en Monterrey mantiene una fundación filantrópica que en el lapso invirtió 12 millones de pesos.
Axtel redujo su consumo de combustibles en 13%, evitando la emisión de siete mil toneladas de CO2 y el uso de 28 toneladas de papel, al cancelar la impresión de dos millones 784 mil 963 facturas.