Ineficiencia. El Instituto Nacional de Migración no cumple con sus labores cabalmente. (Archivo)
Las autoridades migratorias detienen extranjeros en situación irregular al interior del territorio nacional más que en la línea fronteriza porque hay un reconocimiento de que en la franja se mueve un mercado regional, aseguró Rodolfo Casillas, profesor-investigador de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO).
En entrevista, dijo que el Gobierno no tiene interés en contener los flujos migratorios en los más de 700 puntos ilegales de cruce.
REFORMA publicó que la frontera sur de México es tan porosa, que el Gobierno federal tiene detectados hasta 704 puntos informales de cruce de indocumentados, a lo largo de sus más de mil 100 kilómetros de longitud
"Pareciera que hay un acuerdo de que debe haber una especie de colchón territorial donde puedan ingresar hasta un límite determinado los flujos migratorios", indicó.
Explicó que la modificación de las visas de visitante regional y de trabajador temporal, la ampliación de estos documentos para los nacionales de Honduras y El Salvador y la posibilidad de que se internen hasta 120 kilómetros al interior del territorio nacional permite ver que hay un reconocimiento implícito de que existe un mercado regional que abarca los tres países centroamericanos y una parte del sur de México.
Se crea, prosiguió, un gran colchón territorial para que los flujos laborales que se mueven en la región puedan transitar, lo que mantiene la gobernabilidad en la zona, al tiempo que se pone un cerco mayor para los migrantes que quieren ir a Estados Unidos.
"Por eso la labor de Migración no se va a la frontera jurídica, sino se va a una frontera más económica-cultural, en eso hay flexibilidad", indicó.
OLVIDAN GOBIERNO FRONTERA SUR
Basta mirar que la Subsecretaría de Población, Migración y Asuntos Religiosos se encuentra acéfala hace seis meses para advertir que la Coordinación de Atención Integral a la Frontera Sur no tenía futuro, aseguró Rodolfo Casillas, investigador de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO).
"Si a ese nivel no hay un responsable, una comisión ad hoc que no le dan los recursos, te dice que no tenía mucho futuro", dijo.
Esta coyuntura, refirió, fue la crisis de los niños migrantes de mediados de 2014, por la cual se implementaron medidas como impedir el uso del tren.
Expuso que los menores de edad no utilizan el tren para llegar a EU, sino las carreteras, lo que refleja que México, o le quiso ver la cara a EU, o que había una gran ignorancia, precisó.