El senador perredista Armando Ríos Piter consideró que la propuesta fracasó rotundamente, pues no eliminó el gasto superfluo ni los programas clientelares. (Especial)
La intención del gobierno federal de conformar un presupuesto base cero para 2016, fracasó, de acuerdo con legisladores de oposición y especialistas en la materia.
"Lo que se hizo fue una reasignación de presupuesto, una reingeniería administrativa o un recorte, pero no un Presupuesto Base Cero", dijo el senador panista Jorge Luis Lavalle, secretario de la Comisión de Hacienda.
"Lo que ocurrió dista mucho de eso, tanto desde la propuesta del gobierno como en la Cámara de Diputados".
El senador perredista Armando Ríos Piter consideró que la propuesta fracasó rotundamente, pues no eliminó el gasto superfluo ni los programas clientelares.
"Cuando sabemos que existen bolsas millonarias que corren el riesgo de perderse nuevamente en los 'moches', pues estamos hablando de que este presupuesto se está haciendo de la misma forma en la que se han hecho los demás, en años anteriores", indicó.
Vidal Llerenas, diputado de Morena y secretario de la Comisión de Presupuesto, consideró que llamar presupuesto base cero al proyecto del Ejecutivo fue una ocurrencia.
"Lo de base cero es una mala broma, porque, ¿qué decisión trascendente del presupuesto tomaron?, ¿qué programa desapareció?, ¿qué programa nuevo crearon?
"Simplemente hicieron un recorte y en éste no hay atrás evaluaciones de costo-beneficio ni de rentabilidad social", sostuvo.
Mariana Campos, coordinadora del Programa de Gasto Público de la organización México Evalúa, calificó la propuesta como un buen deseo que quedó lejos de convertirse en una auténtica renovación del gasto público.
"Seguimos sin tener los mecanismos adecuados para definir la asignación de los recursos públicos ¿estamos seguros que los proyectos que vamos a financiar son necesariamente los que necesitamos? No tenemos aún las herramientas para garantizar eso", dijo.
Gabriel Farfán, director general de Comunidad Mexicana de Gestión Pública para Resultados, opinó que el gobierno perdió la oportunidad de realizar un cambio auténtico en la forma en que se gasta el dinero de los mexicanos y la lección es que el gobierno no tiene ni la metodología ni la capacidad para hacerlo.