En este tiempo de tregua y reflexión posterior a las campañas que ¡por fin! terminaron el miércoles pasado, los amarres en los equipos de los operadores e ingenieros electorales están a todo lo que da en los distritos de La Laguna, con harto ruido por las distintas versiones que corren dentro y fuera de los partidos de los principales contendientes, es decir, Priver y PAN. El distrito que concentra la mayor atención es el 06 de Coahuila, con sede en Torreón, en donde Jorge Zermeño pretende mantener para los panistas el control mientras que José Refugio Sandoval quiere recuperarlo para el tricolor. Dicen los que saben que este duelo será “a muerte” entre las estructuras de ambos partidos y que pueden generarse algunas sorpresas, toda vez que esta elección es de las llamadas huérfanas en la región.
Por el lado de “Cuquis” Sandoval se rumora de una posible jugada de algunos liderazgos priistas que quieren dejar clara su importancia al aguantar lo más que se pueda a la clientela a la hora de salir a votar, con la idea de meterle un susto al candidato que no goza de ascendencia entre las “bases” priistas por militar en el Negocio Verde. Con ello, dicen, los líderes buscan negociar sus intereses y condicionar el apoyo necesario para que Sandoval gane la elección. No obstante, como ya se ha dicho, el suspirante del Priver cuenta con el respaldo de una buena parte de la estructura del ayuntamiento de Torreón, que ha operado a su favor incluso desde meses antes del arranque de la campaña. Por el lado de Zermeño, no queda claro aún hasta dónde el pasado de pugnas entre el exembajador de México en España y el senador Luis Fernando Salazar y el diputado federal Guillermo Anaya pueda hacerse presente el día D. Mientras algunas voces hablan de que ambos grupos y sus cabezas hicieron las paces para cerrar filas en torno a la figura de don Jorge, otras apuntan a que ya se dio una nueva fractura motivada en parte por el desaguisado que tuvieron Ignacio García, dirigente municipal del PAN, y Malena Fernández, operadora estrella del blanquiazul en Torreón. Vamos a ver de qué cuero salen más correas.
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En lo que respecta a los distritos 05 de Coahuila y 02 de Durango, las cosas pintan no tan complicadas para Flor Rentería y Rocío Rebollo, ambas del Priver, quienes se enfrentan a las panistas Blanca Eppen y Marycarmen Ávalos, respectivamente. El interés en estos distritos está más relacionado con el nivel de participación ciudadana y el margen de triunfo, porque hay que recordar que en la elección “huérfana” pasada, la de 2009, tanto Miguel Riquelme como Ricardo Rebollo se impusieron por holgado marcador de 3 a 1. ¿Podrán doña Flor y doña Rocío igualar o superar la hazaña? Los conocedores dicen que la respuesta depende de la cantidad de lana que fluya o no durante la jornada.
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En donde las travesuras no parecen tener fin es en el Tribunal de Justicia Municipal. Nuestros subagentes disfrazados de máquinas de escribir arrumbadas nos reportan de al menos dos casos suscitados en esta semana en los que fueron alterados los croquis por parte de los peritos y se fabricaron testigos para exculpar a los responsables de sendos choques en la ciudad. En uno de los casos participó un taxista que se pasó un rojo e impactó un vehículo de un particular, pero las evidencias no fueron suficientes para responsabilizar al chofer del servicio público quien la libró gracias a las palancas y amistades en el Tribunal. En este mismo hecho llamó la atención que a la hora de consultar el tan cacareado nuevo Reglamento de Movilidad Urbana, el juez calificador sacó una versión que no coincide con la que está disponible en la página web del ayuntamiento de Torreón, con lo que crecen las sospechas de que los artículos se están interpretando a conveniencia de la parte que dé más “apoyos”, con el consentimiento -claro está- del presidente del Tribunal, Jesús Jasso Frayre. Pero para tapar un poco el ojo al macho y frente a las múltiples quejas que existen en la dependencia de justicia municipal, don Jesús, de la mano del contralor Javier Lechuga, lanzó esta misma semana una campaña con el bonito nombre de “Tu opinión es nuestra mejora” con la que se pretende aplicar 10,000 encuestas a ciudadanos que hayan tenido el infortunio de acudir al Tribunal con el fin de que califiquen el servicio. Lo que se preguntan propios y extraños es ¿para qué tanto mitote si es tan fácil revisar las numerosas quejas para saber quiénes son los que andan de traviesos? Son cosas que el respetable no se explica.
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Quien no halla ni dónde meterse luego de sus tremebundas declaraciones sobre la posibilidad de que tornados causen estragos en La Laguna es el director de Protección Civil de Torreón, Alberto Porragas. Y es que apenas se dio a conocer la información, decenas de ciudadanos de San Pedro y Madero, en donde según don “Tito” podrían golpear los citados fenómenos naturales, acudieron a las oficinas de los ayuntamientos a preguntar dónde estaban los refugios en caso de que se presentara un tornado. Los directores de Protección Civil de ambos municipios, Fernando Verdú y Paulo Rodríguez, tuvieron que salir a calmar a la asustada gente y a decir que Porragas no sabe de lo que está hablando y que no es cierto que en reciente reunión se haya hablado del peligro de posibles tornados en la Comarca Lagunera. En medio de las críticas y bullas lanzadas al “protector” de la Perla de La Laguna, se levantaron voces ácidas para cuestionar hasta cuándo piensa don Miguel mantenerlo en el cargo, pues parece que no da una. Como recordará usted, memorioso lector, estamos hablando del mismo director al que se le perdonó el uso de un vehículo oficial para irse de vacaciones de Semana Santa a Parras, y del mismo sobre el cual pesan acusaciones de empresarios y ciudadanos de que permite que ciertos empleados pidan “ayuditas” a cambio de hacerse de la vista gorda en las inspecciones, además de que promueve su empresa de capacitación aprovechándose de su puesto. Todo un ejemplo, pues.
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La que de plano ve la tempestad y no se hinca es la Secretaría de Finanzas que comanda Ismael Ramos, gran aficionado a las escaramuzas cuando de preguntas sobre temas incómodos se trata. Y es que, en medio de todo el escándalo por la presunta red de corrupción que investiga el Tío Sam y que tiene que ver con la megadeuda, don Lito se había comprometido muy formalmente a publicar la lista de los acreedores del gobierno de Coahuila una vez que comenzaran a pagar los adeudos, la mayoría originados en la pasada administración, y para los cuales tuvieron que aumentarle a la ya de por sí abultada deuda bancaria unos 2,500 millones de pesos. Y los pagos ya están fluyendo, por fin, pero no así la información. Ante el mutis del funcionario, uno de nuestros subagentes se dio a la tarea de hacer una solicitud de información para ver si así daban a conocer el destino que tendría ese dinerillo. No obstante, la respuesta es un enigma que nuestro equipo de Shelocks Holmes aún intenta descifrar. Resulta que, según la Sefin, esa información no es posible darla a conocer porque “puede dañar la estabilidad económica y financiera del estado” además de “los intereses de Coahuila”. ¡Recórcholis! Los maldicientes de inmediato reaccionaron y lanzaron un punzante cuestionamiento: ¿qué dañará más la estabilidad económica del estado: no dar a conocer esta información o los pesados compromisos financieros, que tienen a la entidad sin recursos para obras, y que no han sido transparentados en su totalidad? Ahí se lo dejamos, pues.
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Versiones que han cruzado el lecho seco del río Nazas apuntan a que la práctica del cobro de diezmo y hasta veintiesmo también forma parte de los usos y costumbres de algunos funcionarios de Gómez Palacio. Nuestros subagentes disfrazados de cascos de construcción nos informan que una de las dependencias en donde esta situación se registra de forma cotidiana es la Dirección de Obras Públicas, a cargo de Fernando Uribe Novella. Cuentan que don Fernando y su gente piden hasta el 20 por ciento por obra otorgada a las empresas contratistas que le trabajan al ayuntamiento y que lo hacen con el consentimiento del contralor Efraín Acosta Sosa. Dicen que la cosa es tan grave que dichos funcionarios han incrementado sus peculios de forma considerable en muy poco tiempo y que si se revisan los sueldos devengados por ellos como servidores públicos, pues las cuentas simplemente no cuadran. Las mismas voces comentan que esta es la causa por la cual Obras Públicas busca acaparar todas las licitaciones que lanza el ayuntamiento para aplicarle la vieja táctica del “quinto real del Virreinato”, aunque se trate de proyectos que no necesariamente debe ejecutar su oficina. ¡Qué belleza!
