En sólo ocho días, Santos cambió su rumbo en la Liga y en la Copa. Pese a un inicio incierto, hoy la escuadra lagunera liga tres triunfos y todo gracias a saber aprovechar las oportunidades.
Hace dos viernes se decía que las cosas se iban a poner "feas" si los Guerreros perdían en casa ante Monterrey. Pero el cuadro albiverde sabía que esa era una oportunidad inmejorable, sobre todo para reconciliarse con su afición; al menos para darle un respiro a su entrenador y de paso calma y confianza al plantel.
Y así fue, con una actitud convencida y un rival que se prestó, Santos Laguna inició su andar hacia arriba. Golean a Rayados en casa. Vencen en la Copa de visita, donde ya tomaron el control del Grupo Uno. Y luego le ganan de visita al Querétaro "de Ronaldinho".
La figura hasta esta parte del torneo, incluso en los partidos en los que no se ganó, ha sido el nuevo portero: Agustín Marchesín. Mucho se dijo de la salida de Oswaldo del equipo, tanto que ahora pareciera que ya pocos lo extrañan. Siquiera lo recuerdan.
El argentino, como dijo en una entrevista para El Siglo de Torreón, quiere hacer su propia historia en Santos y el futbol mexicano. Muchos ya bromean al decir que está próximo a irse al América. En ese caso, pienso que podría irse a Europa sin escalas.
Qué difícil ha de ser la vida del portero; si se equivoca, su error se ve reflejado en el marcador. Y con una vez que se equivoque en 90 minutos puede ser suficiente para echar a perder un resultado. Por otro lado, el portero puede ser figura y aún así no alcanzarle para llevarse un triunfo al final de la jornada. Es el hombre que saca el balón del fondo de las redes y, al mismo tiempo, el primero donde nace un ataque.
Marchesín pinta para ser ídolo en la región, aunque depende de que los intereses económicos no superen a los deportivos; este equipo necesita ídolos.
Lo que viene: mañana Santos enfrentará al Atlético San Luis, otro equipo de "segunda mano", en busca del bicampeonato en la Copa, lo cual le daría casi la oportunidad de volver a la Copa Libertadores (donde si no se da avanzar a instancias finales, al menos se observan los posibles refuerzos para el próximo torneo).
Luego vendrán las Chivas al Corona. Ya veremos si al Santos le alcanza para seguir en ascenso. Contra Querétaro se sufrió para sacar los tres puntos. Pero qué mejor ahora sufrir ganando, ¿o no?
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