Difícil escenario. Vista de un misil sirio durante combates en el antiguo oasis de la ciudad de Palmira.
El grupo terrorista Estado Islámico (EI) tomó ayer el control total de la ciudad histórica de Palmira, cuyas ruinas están incluidas en la lista del Patrimonio de la Humanidad de la Unesco, dijo el director de Antigüedades y Museos de Siria, Maamún Abdelkarim.
"Esto es un desastre para todo el mundo, no sólo para los sirios", lamentó Abdelkarim en unas declaraciones por teléfono.
Aun así, el responsable sirio destacó que "por fortuna", antes de la irrupción del EI en las ruinas, las autoridades consiguieron sacar un centenar de estatuas y las trasladaron a lugares seguros.
Pese a que los yihadistas dominan tanto la urbe moderna de Palmira como el sitio arqueológico, situado en la periferia suroccidental, Abdelkarim agregó que todavía hay algunas bolsas de resistencia del ejército y sus aliados en determinadas áreas.
La televisión oficial siria indicó que las Fuerzas de Defensa Nacional, milicias prorrégimen, se replegaron de Palmira, situada en la provincia central de Homs, tras evacuar a los civiles que quedaban en la población.
No obstante, según el canal, todavía hay unidades militares movilizadas en las carreteras que conducen a la localidad, y la aviación castrense están llevando a cabo bombardeos contra "concentraciones de los terroristas que se han infiltrado dentro".
El activista Samer al Homsi, de la opositora Red Sham, confirmó por internet que toda Palmira está bajo el dominio del EI, después de la retirada "repentina" de los efectivos gubernamentales en dirección a unas minas de fosfatos en las áreas de Sawana y Jinifis.
TROPAS ALISTAN SU SALIDA
Por su parte, el Observatorio Sirio de Derechos Humanos subrayó que todavía quedan tropas del régimen en el oeste y este de la ciudad, pero que están preparando su salida hacia Jinifis.
Ayer por la mañana, los radicales volvieron a irrumpir en Palmira desde el norte, después de que fueran expulsados por el ejército el domingo.
El Estado Islámico inició hace una semana una ofensiva en el este de Homs, donde se ubica Palmira.
En este tiempo, se ha hecho con el dominio de los pueblos de Al Sujna y Al Ameriya, así como de los campos de gas de Al Arak y Al Hil.
Situada en un oasis, Palmira fue en los siglos I y II d.C. uno de los centros culturales más importantes del mundo antiguo y punto de encuentro de las caravanas en la Ruta de la Seda, que atravesaban el árido desierto del centro de Siria.
Antes del inicio de la contienda en el país, en marzo de 2011, sus ruinas eran una de las principales atracciones turísticas del país árabe y de la región.
La directora general de la Unesco, Irina Bokova, pidió hoy "un alto el fuego inmediato" en este lugar.
"Estoy muy preocupada por la situación de Palmira, esta ciudad histórica que puede ser destruida.
Los combates amenazan a uno de los lugares más significativos de Medio Oriente y la población civil que se encuentra allí", indicó Bokova en un comunicado.
EU asegura que mantienen estrategia
El Pentágono reafirmó ayer su confianza en que la estrategia contra los yihadistas del Estado Islámico (EI) en Irak es la correcta, pese al revés que ha supuesto la caída de la ciudad de Ramadi por la desbandada del Ejército iraquí.
El portavoz del Pentágono, el coronel Steve Warren, negó ayer que vayan a revisar la estrategia para degradar y derrotar al EI en Irak, pese a que el Departamento de Defensa de EU reconoció este martes fallos tácticos y de liderazgo en la caída de Ramadi.