Representaciones escénicas, ciclos de cine, exposiciones, charlas y talleres integran el programa conmemorativo con el cual Galicia, España, celebrará el 150 aniversario de nacimiento de Ramón María del Valle-Inclán, ocurrido el 28 de octubre de 1866.
El homenaje, promovido por la Consellería de Cultura y Educación, tiene el objetivo de reconocer la labor del dramaturgo, como una de las figuras más representativas de las letras en España.
Por esta razón se planeó un abanico de actividades recreativas, informa el portal galiciadigital.com.
Para acercar al público a la obra del escritor se organizarán sesiones de cuentacuentos, montajes escénicos, espectáculos de títeres y proyecciones fílmicas de los textos que se adaptaron. Además saldrán ediciones conmemorativas de publicaciones como La Cátedra de Valle-Inclán.
De acuerdo con sus biógrafos, Valle-Inclán vio la primera luz en Villanueva de Arosa, Pontevedra; estudió Derecho en la Universidad de Compostela y más adelante realizó un viaje corto a México durante el cual trabajó en El Correo Español y El Universal. Volvió a Madrid en 1895, donde inició su labor literaria con algunos cuentos y artículos.
Al entregarse al mundo de las letras, publicó su primer libro Femeninas (1895), un relato sobre una niña chole, inspirada en la cultura mexicana. Epitalamio (1897) mostró su naciente interés por el teatro.
El estilo del autor seguía dos líneas: poética y estilizada, una influida por el simbolismo y otras por el decadentismo. Su visión distorsionada de la realidad lo colocó entre los precursores de la Generación del 98. Grupo integrado por los afectados por la crisis moral, política y social de la guerra hispano-estadounidense.
Hizo presente el arte erótico refinado en las cuatro Sonatas (1902-1905), representando un ambiente campesino y popular creó Flor de santidad (1904) y Aromas de leyenda (1907).
Águila de blasón fue su primera comedia bárbara, a la que le siguió Romance de lobos (1908), Los cruzados de la causa (1908), El resplandor de la hoguera (1909) y Gerifaltes de antaño (1909) que muestran una amplia visión histórica de la guerra carlista, según datos difundidos por la página web epdlp.com.
Su pieza teatral Luces de bohemia (1920) estableció una estética de la deformación, entre los conceptos de lo que es bajo o feo, un expresionismo gestual y caricaturesco que el autor denomina como “el héroe reflejado en el espejo cóncavo”.
Cenizas (1899), El marqués de Bradomín (1906), Cuento de abril (1909), Voces de gesta (1912) y La marquesa Rosalinda (1913), Los cuernos de don Friolera (1921), Las galas del difunto (1926) y La hija del capitán (1927), son algunas de las obras que integran el repertorio del español.
Fue nombrado director de la Academia Española de Bellas Artes en Roma, en 1933. Un año después se mudó a Santiago de Compostela, donde murió el 5 de enero de 1936, señala el portal biografiasyvidas.com.