Mientras que los productores de algodón de San Pedro pugnan por tener más agua para ampliar la superficie de siembra, para los campesinos de Madero al aumentar la superficie podría ser negativo, por que representa un caída en el precio del forraje, cultivo que predomina en ese municipio, ya que se generaría una sobreproducción y para ese cultivo no existe precio de garantía como para el algodón.
El dirigente de la CNC en Madero, José Álvarez Echeribel, dijo que una alternativa para que hubiera un equilibrio es que en los ciclos futuros se implementaran dos ciclos de riego: el de primavera-verano y otoño-invierno, como se hacía en antaño, además de empezar a meter cultivos que sean costeables y que dejen mayores ganancias, pero para la planeación debe ser por parte de Sagarpa.