La pasión de Cristo.
Como cada Semana Santa, el cine y la TV buscan acercar a la gente a Jesucristo. La figura de Jesús de Nazaret ha sido una de las más tratadas por el Séptimo Arte desde el mismo momento de su nacimiento.
Hay clásicos como Los Diez Mandamientos, de Cecil B. De Mille, se han sucedido visiones muy polémicas, como las de Pasolini o Scorsese; musicales (Jesucristo superestar) y hasta parodias (La vida de Brian).
Los hermanos Lumiére rodaron en 1897 La pasión de Horitz y conmocionaron al público del incipiente cinematógrafo. Tiempo después, Mel Gibson demostró que la historia de Jesucristo seguía interesando, y mucho, a millones de espectadores: su cinta La Pasión de Cristo arrasó en las taquillas de los cines, con casi 300 millones de dólares sólo en EU.
La primera versión cinematográfica conocida sobre la vida, pasión y muerte de Jesús data de 1897, poco más de un año después de que los hermanos Lumiére comenzaran a experimentar con su invento cinematográfico.
Los Lumiére advirtieron rápidamente la importancia y popularidad del tema, y recurrieron a él en varias ocasiones durante los primeros años del cine. Filmaron La pasión de Horitz, también conocida como La vida y pasión de Jesucristo (1897).
Casi al mismo tiempo, la productora católica Bonne Presse encargó al realizador Lear otra película sobre Cristo, que se tituló Pasión, estrenada en 1897. Ambas versiones alborotaron al público por su contenido.
Ya en el Siglo XX, el francés Ferdinand Zecca, procedente del café-concierto y uno de los fundadores del cine galo, inicia en 1902 Vida y Pasión de Jesucristo, una serie de cuatro producciones sobre el tema.
La productora francesa Film d'Art fue la primera en intentar una cinta de más calidad artística sobre Jesucristo, ya que las primeras estaban dirigidas a las clases bajas.
Esta tendencia se trasladaría pronto a Italia, donde a partir de 1912 comienzan a rodarse producciones en las que se intenta superar la estética teatral y se cuida el decorado y la figuración. El cénit del cine religioso italiano de esa época llegaría con Christus (1916).
En Estados Unidos, sería otro de los grandes pioneros del cine, Griffith, quien tocase el tema de Cristo con verdadera espectacularidad por primera vez. Incluyó la Pasión en una de las cuatro partes de que constaba su histórica Intolerancia, de 1915.
Junto a Intolerancia, los críticos han destacado como la gran película sobre Jesús de la época del cine mudo a INRI, realizada en 1923 por Robert Wiene.
A partir de la década de los 70, comienzan a rodarse las versiones más modernas de la historia de Jesucristo y también las que mayores polémicas han causado en todo el mundo cristiano.
Para empezar, muchos creyentes no entendieron en 1973 cómo era posible rodar la vida de Cristo en una versión musical sin rozar la blasfemia. Y es que el director estadounidense Norman Jewison -famoso por El Violinista en el Tejado (1971)- decidió llevar al cine la ópera rock Jesucristo Superstar.
Aquéllos que criticaron la película por el mero hecho de ser rodada, no contaron con argumentos suficientes para "dilapilarla" una vez vista.
La espectacularidad vuelve a ser el enfoque que prefiere dar el italiano Franco Zeffirelli en la versión que rueda en 1977, Jesús de Nazareth. A diferencia de sus antecesores, más preocupados por los aspectos artísticos que por los del espectáculo, Zeffirelli cuenta para su visión de Jesús con un auténtico reparto de lujo, en el que aparece Robert Powell como Jesús.
En 1979, se rueda la versión humorística del grupo británico Monthy Python La vida de Brian, que cuenta cómo un joven nace en Judea, en un pesebre, y casi al mismo tiempo que Jesucristo.
La controversia que provocó el ferviente católico Mel Gilbson con su Pasión es sólo comparable a la causada por La Última Tentación de Cristo, dirigida en 1988 por Martin Scorsese.
Interpretada por Williem Dafoe en el papel de Jesucristo, La Última Tentación de Cristo causó polémica entre los católicos por las escenas en las que Jesús, en su delirio de muerte en la Cruz, se imagina a él mismo y a María Magdalena haciendo el amor, a María mirando su hinchado y desnudo vientre cuando se halla en estado de buena esperanza y a Jesús ya viudo, aceptando las propuestas sexuales de Marta y María.
Scorsese se mostró estupefacto por las críticas recibidas, cuando él pretendía acercar la figura de Jesucristo a todo el mundo.
La Pasión de Mel Gibson, sobre las últimas 12 horas de la vida de Jesucristo, consiguió al menos igualar la polémica vivida con la cinta de Scorsese. Incluso antes de su estreno, las críticas le llegaron por todos los lados: la calificaron de "anticatólica" los católicos; de "antisemita" los judíos y de "locura" aquéllos que no veían un mercado para un filme rodado en latín y arameo y que por tanto ha de verse con subtítulos. (Con información de EFE)
Una opción en cartelera
En estos días se encuentra en cartelera la película La resurrección de Cristo protagonizada por Joseph Fiennes y Tom Felton.
La trama sigue la épica historia bíblica de la resurrección, contada a través de los ojos de un no creyente. Clavius, un poderoso militar romano y su ayudante Lucius, tienen la tarea de resolver el misterio de lo que le sucedió a Jesús en las semanas siguientes a la crucifixión, con el fin de refutar los rumores de un Mesías resucitado y prevenir un levantamiento en Jerusalén.