Para nada es agradable al pueblo quedar fuera del torneo reducido, a donde siempre acudimos con el corazón abierto y el deseo de una segura diversión, con ilusiones justificadas y esperanzas bien puestas, porque Santos casi siempre, contó con planteles que garantizaban competitividad. Ahora mismo y viendo el despliegue dominical, uno cae en la cuenta de que muy pocos de los alineados con la histórica casaca podrían alternar con las figuras que marcaron toda una época.
De alguna forma el futbol es como la vida, con etapas contrastantes, aunque en este caso se resiente una resaca de planificaciones que no tuvieron la claridad adecuada, quizá llevados por presupuestos limitados donde las posiciones fueron llenadas con ilusiones en varios chicos que pasaron en Europa desapercibidos y que supusieron en Inteligencia Deportiva, que así se le llama al grupo de pensantes, en México darían tanto que les sería suficiente para dominar el panorama, lo cual está visto, no resultó y fueron desfilando en la cancha como lo que son, jugadores comunes.
Mirando al precipicio junto con otros colegas en desgracia, ahora se corre con la obligación absoluta de reordenar el navío, so pena de irse a pique. No hay alternativa. Y es ahora cuando a falta de los cofres rebosantes de dólares se deben estimular la imaginación y el conocimiento, acelerar los acercamientos con quienes sea necesario para buscar con ideas novedosas la manera de conseguir los elementos necesarios, sin desprenderse de Marchesín, Araujo, Molina e Izquierdoz, que seguramente están observados y pretendidos por clubes que también aspiran a consolidarse.
No será una tarea sencilla. Tampoco es posible invitar a Theo Epstein el gerente operativo de Cubs, para que nos regale algunas de sus ideas regenerativas que lo hicieron tan famoso. Santos debe reedificarse desde adentro sin que tiemble la mano para despejar a quienes no han cumplido al nivel apetecido y para reinstalarse en la élite a donde ha pertenecido por años, a donde estableció marcas e historias de éxito. No puede continuar hacia atrás y viendo al abismo.
También la falta emprender una firme campaña para reencontrarse con su gente, pues acudir al TSM, bello y espacioso pero que resulta prohibitivo para el verdadero pueblo, para la gente sencilla, la que sobrevive solamente, ésa que sólo puede verlos a la distancia, lejos del corazón y cerca del olvido. Una cruzada para ocupar el espacio que siempre tuvo como representativo comarcano pero que se ha vuelto elitista en un escenario sólo para privilegiados o fans de moda.
Hay el tiempo suficiente para la toma de las decisiones adecuadas, que seguramente ya se están fraguando en el seno verdiblanco, con la obligación de no fallar de nuevo en la elección porque los porcentajes no perdonan a nadie y están al acecho de varios con los mismos síntomas. El técnico debe insistir en brindar espacio a los canteranos, donde existe un digno material para considerar, con lo que hemos visto y el chico Cisneros que tiene potencia, futbol y gol. No todo el espacio puede ser para extranjeros de medio pelo. Por lo pronto, torneo reducido por tv y no hay más.
Arcadiotm@hotmail.com
