Favorito. El empresario estadounidense Donald Trump, el favorito en la carrera por la candidatura republicana a la Casa Blanca.
En un día frenético de mítines, los precandidatos republicanos y demócratas a la Casa Blanca buscaron ayer en Estados Unidos arañar votos en vísperas del crucial nuevo supermartes, cuando cinco estados celebran elecciones primarias.
El 15 de marzo marcará un antes y un después en la campaña electoral, pues Florida, Illinois, Misuri, Carolina del Norte y Ohio acudirán a las urnas para elegir a los candidatos de ambos partidos a la Presidencia, algunos de los cuales, como los conservadores Marco Rubio y John Kasich, podrían quedar fuera de la contienda.
La jornada resulta trascendental, sobre todo, para el Partido Republicano, dado que en Florida, Illinois y Ohio el ganador se lleva todos los delegados en liza.
Los favoritos en la carrera presidencial, el republicano Donald Trump y la demócrata Hillary Clinton, persiguen una victoria contundente que les otorgue el mayor número posible de delegados -ellos designan a los candidatos en las convenciones nacionales de julio- para despejar la senda que conduce a la nominación.
El polémico magnate inmobiliario cuenta con 460 delegados conquistados desde que arrancó el proceso de elecciones primarias y caucus (asambleas populares) el pasado 1 de febrero, mientras la exsecretaria de Estado acumula 766.
El multimillonario, que necesita 1, 237 delegados para alcanzar la candidatura, aventaja en esa competición a sus adversarios: los senadores de origen cubano Ted Cruz (369 delegados) y Marco Rubio (163), así como el gobernador de Ohio, John Kasich (63 delegados).
Clinton, que debe recabar 2, 383 delegados para alzarse con la nominación, también lleva una notable distancia a su rival, el veterano senador por Vermont Bernie Sanders (551 delegados). En la batalla republicana, todas las miradas están puestas en Florida y Ohio, que reparten 99 y 66 delegados, respectivamente.
En Florida, Rubio, que representa a ese estado en el Senado de EU, necesita desesperadamente un triunfo para seguir en la carrera presidencial, en tanto que Kasich también precisa de una victoria en Ohio para no quedar fuera de juego.
Si Rubio y Kasich salieran victoriosos de sus respectivos estados, el futuro inmediato de Trump se nublaría y Cruz conservaría la esperanza de darle caza, si bien las encuestas parecen decantarse por el empresario neoyorquino.
Según un sondeo divulgado hoy por la Universidad de Quinnipiac, Trump recibe en Florida el 46 por ciento en intención de voto y Rubio sólo el 22 por ciento.
Los otros dos contendientes republicanos, Cruz y Kasich, tendrían un 14 por ciento y un 10 por ciento, respectivamente, en Florida.
Más reñida se presenta la votación en Ohio, donde el magnate y el gobernador empatan con el 38 por ciento, en tanto que Cruz, senador por Texas, obtendría el 16 por ciento y Rubio, el 3 por ciento.
No sorprende, pues, que Trump cancelara un acto de campaña programado hoy en la ciudad de Doral, en Florida, para ofrecer en su lugar un mitin en Youngstown, Ohio.
El magnate afronta este nuevo supermartes tras un crispado fin de semana por los episodios de violencia en sus mítines, después de anular un acto el viernes por altercados entre sus adeptos y manifestantes que se oponen al multimillonario por su discurso señalado de xenófobo.
"No hay violencia. ¿Saben cuántas personas han resultado heridas en nuestros mítines? Creo que básicamente ninguna, aparte de quizá alguien golpeado una vez. Pero no hay violencia", dijo ayer Trump en Carolina del Norte. Frente a los sondeos, sus rivales no tiran la toalla, como Rubio, quien afirmó ayer desde la floridiana ciudad de Jacksonville: "Las encuestas están locas y lo voy a demostrar mañana".
En Ohio, Kasich tampoco se rinde y ayer hizo campaña apoyado por el candidato presidencial republicano en 2012, Mitt Romney, quien ha acusado a Trump de ser un "fraude" y se ha erigido en uno de los líderes del sector tradicional del partido que rechazan al magnate.
En el lado demócrata, el senador Bernie Sanders espera replicar el éxito que consiguió el pasado 8 de marzo en Michigan, cuando se impuso contra todo pronóstico a Clinton en las primarias de ese estado.
Las encuestas conceden a la exsecretaria de Estado victorias claras en Florida (246 delegados) y Carolina del Norte (121), pero presentan una competición más ajustada en Misuri (84 delegados), Ohio (159) e Illinois (182).
Advierten historiadores riesgos por ‘enojo’

El temor a un Estados Unidos cambiante está alimentando parte del enojo manifestado públicamente alrededor de la campaña de Donald Trump por la nominación presidencial del Partido Republicano, dijeron el lunes los historiadores Ken Burns y Henry Louis Gates Jr.
“Estamos ahora un momento retrógrado en el cual la alarma racista está entre nosotros”, dijo Burns, un realizador de documentales ganador del premio de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas. Trump “le está hablando a una necesidad y a un conjunto de temores profundos dentro de un segmento grande de la comunidad estadounidense”, agregó Gates, un intelectual de la Universidad de Harvard y conductor de un programa de Genealogía en PBS. Esos temores deben ser apaciguados, y se deben formular políticas para hacer frente a las necesidades de quienes están preocupados respecto a su futuro, señaló. Burns dijo que algunos de los comentarios y acciones de Trump está siendo un guiño hacia nuestros hermanos que están apegados a sus ideas”.