Postura. El productor Omar Suárez se dijo dispuesto a dialogar con la familia del fallecido cantante.
Luego de que la tarde de ayer viernes se reanudaran las actividades en el Teatro San Rafael con la obra Amor eterno, el productor Omar Suárez aseguró: "ya podré dormir tranquilo", pues el conflicto con los derechos de las canciones de Juan Gabriel, ha sido muy agotador.
Sin embargo, comentó que tras la clausura del foro el domingo pasado, el elenco, que en este momento está ensayando, trabaja en gran armonía.
"Me he cansado de decirlo, hay un profundo respeto por el maestro Juan Gabriel, por su familia, sus herederos, no queremos que se malinterprete de ninguna manera", aseguró.
Agregó que esto "no es un reto de haber quién puede más", sino que simplemente es una situación de legalidad que se está arreglando, por lo que reitera su admiración por el "Divo de Juárez".
Subrayó que siempre va a estar abierta la puerta del teatro a la familia del compositor para que vean la puesta y también las 24 horas del día está disponible su línea telefónica para ellos.
Aclaró que no busca un problema con la Sociedad de Autores y Compositores de México (SACM), ni con nadie, sólo quiere hacer su trabajo de la manera más profesional posible, con una gran producción y despliegue de artistas en escena.
"Quien se haya sentido perjudicado lo entendemos y bueno, siempre estoy abierto al diálogo, a platicar todo lo necesario", aseveró.
Opinó que este inmueble cuenta con bastante prestigio y que "el compromiso más grande es con la señora Fábregas", para que todo el mundo sepa que está realizando las cosas dentro del marco de la legalidad".
Suárez aseguró que Juan Gabriel efectivamente estaba de acuerdo con el proyecto y que quienes dicen lo contrario "no les consta, pues lo sustentan sólo con un correo electrónico".
