Sentinel. Debido a una anomalía detectada en el cohete se determinó posponer el lanzamiento.
El lanzamiento del satélite medioambiental Sentinel-1B se canceló ayer por tercer día, esta vez por una anomalía en el cohete Soyuz, informó Arianespace.
"Debido a una anomalía detectada durante la cronología de lanzamiento del Soyuz, la cuenta atrás se ha interrumpido", según esta compañía, que señaló que el vehículo de lanzamiento y los satélites se colocaron en el modo de espera, y se mantienen en condiciones "totalmente seguras" (además del Sentinel-1B, en el Soyuz hay tres pequeños satélites CubeSats y el Microscope).
El presidente y director ejecutivo de Arianespace, Stéphane Israël, explicó en su cuenta de Twitter: "se produjo una anomalía en la unidad de medición inercial del Soyuz. Paramos por esta noche.
"Estamos trabajando para tratar de confirmar el lanzamiento mañana".
Se trata de la tercera vez que se aplaza o cancela el despegue de estos satélites: los dos primeros aplazamientos, el viernes y ayer sábado, se debieron a problemas meteorológicos (vientos de altura).
Las mediciones realizadas ayer por los globos meteorológicos, a diferencia de las de los últimos dos días, dieron datos buenos de viento, que hicieron poner en marcha el protocolo para el lanzamiento.
Sin embargo, entre media hora y 40 minutos antes del despegue se canceló el mismo por un problema en el lanzador. La nueva fecha de salida se conocerá después de los primeros análisis de esta anomalía, detalló Arianespace.
El Sentinel-1B es el cuarto satélite del programa Copérnico de observación de la Tierra, liderado por la Comisión Europea en colaboración con la Agencia Espacial Europea (ESA).