Más ataques. Un sirio es atendido tras un bombardeo en la región de Douma.
Fuerzas del gobierno sirio atacaron desde el sábado zonas en poder de la oposición cerca de la capital y en Alepo, mientras los rebeldes dispararon su artillería, en una escalada de violencia que dejó un saldo de al menos 31 muertos y alteró la relativa tranquilidad que reinaba en Damasco desde que entró en vigencia el endeble cese del fuego a fines de febrero.
El enviado de la ONU que dirige las negociaciones entre las partes beligerantes en Siria y otros funcionarios occidentales han advertido que el cese de fuego está al borde del derrumbe total debido a la escalada de la violencia y el abandono de las conversaciones el lunes del grupo opositor que respalda Arabia Saudí.
La oposición acusa al gobierno sabotear las conversaciones con sus ataques, pero Damasco dice que sólo ataca a los grupos terroristas que no han firmado el cese del fuego.
El enviado de la ONU, Staffan de Mistura, dijo que las conversaciones continuarán el miércoles como está previsto, pero que los dos bandos están "extremadamente polarizados", lo cual pone en duda la posibilidad de salvar las negociaciones en pos de una solución política al conflicto, que ya lleva cinco años.
La violencia el sábado aparentemente fortaleció la intransigencia de la oposición. Anas al-Abda, líder de la Coalición Nacional Siria con sede en Turquía, que participa de las conversaciones en Ginebra, deploró la "flojedad" de la comunidad internacional en responder a las "masacres" de civiles en Alepo.
Por segundo día consecutivo el sábado, aviones del gobierno bombardearon zonas de Alepo en poder de la oposición, en lo que según los activistas fue la jornada de incursiones más intensa desde que rige el cese de fuego.
Las incursiones aéreas a las zonas en poder de los rebeldes en Alepo mataron a 12 personas, incluidos niños, en un área residencial y un mercado en el distrito Tareeq al-Bab, según el Aleppo Media Center manejado por activistas. Imágenes de la destrucción en la página de Facebook del AMC y otros mostraron edificios destruidos, así como socorristas que sacaban gente de debajo de los escombros, entre ellos niños aterrados y mujeres.
En la víspera, al menos 18 personas murieron en incursiones a varios barrios en poder de los rebeldes en Alepo. Las fuerzas del gobierno han encerrado las zonas en poder de la oposición, salvo un corredor en el noroeste de la ciudad.
El Ejército iraquí, respaldado por la aviación de la coalición internacional, ha recuperado el control de la región de Zejija, en la provincia occidental de Al Anbar, que estaba en manos del grupo terrorista Estado Islámico (EI), informó una fuente de seguridad local.
Ataques desde Siria
Una persona murió y diez resultaron heridas ayer en la ciudad de Kilis, en el sur de Turquía, al impactar dos cohetes del tipo “Katiusha”, lanzados desde el norte de Siria, desde zonas controladas por el grupo terrorista Dáesh (Estado Islámico), informó el Gobierno turco.
Según indica el diario Hürriyet en su versión electrónica, el viceprimer ministro turco, Yalcin Akodgan, indicó desde Kilis que los misiles explotaron en una mezquita, a apenas cien metros de la oficina de Gobernación de Kilis.
El propio Akodgan se encontraba en esa oficina en el momento del impacto, agregó el diario turco.
Horas antes habían caído ayer otros dos proyectiles en la misma ciudad y causaron 16 heridos, entre ellos varios menores. Akdogan señaló en declaraciones a la prensa que el ejército turco respondió a estos ataques con fuego de artillería.
Según el viceprimer ministro turco, desde el pasado 18 de enero se han registrado en Kilis 16 muertos y 45 heridos en ataques de este tipo.
Mandan 250 militares
El presidente Barack Obama ha decidido enviar hasta 250 militares a Siria para ayudar a las fuerzas locales que luchan contra el grupo Estado Islámico, lo que aumenta a 300 la cifra de soldados estadounidenses que combaten a extremistas en esa devastada nación, confirmaron ayer domingo funcionarios del gobierno.
Obama anunciará su decisión durante un discurso el lunes en Hannover, Alemania, al cierre de una gira de una semana por el extranjero en la que el grupo Estado Islámico fue uno de los principales temas abordados en sus reuniones con líderes en Arabia Saudí, Gran Bretaña y Alemania. La medida incrementaría significativamente la presencia estadounidense en Siria y ocurre una semana después de que el secretario de Defensa Ash Carter anunció el despliegue de un número similar de soldados a Irak, donde milicianos del grupo EI también controlan territorio. Alrededor de 50 elementos de operaciones especiales de Estados Unidos ya se encuentran en Siria. La mayoría de los 250 militares adicionales serán también de fuerzas de operaciones especiales, principalmente Boinas Verdes del Ejército. El grupo incluirá además una cifra no revelada de soldados del área médica y de logística para proporcionar apoyo.