Nuevas normas. Las economías se enfrentan a nuevos riesgos financieros. (ARCHIVO)
Responsables de numerosos bancos centrales de los países desarrollados se reivindicaron ayer como herramientas esenciales para afrontar un laberinto macroeconómico global desconocido hasta ahora, caracterizado por un escenario de baja inflación y tipos de interés próximos o iguales a cero.
El sistema financiero se enfrenta a nuevos riesgos que al arrancar el siglo sólo eran meras discusiones teóricas entre académicos, puesto que las llamadas políticas monetarias no convencionales (como aumentar la base monetaria comprando deuda pública) se han convertido en "la única normalidad" en Estados Unidos, Reino Unido, la zona euro o Japón.
El nuevo gobernador del Banco de Francia, François Villeroy de Galhau, introdujo el término "noflación" para describir esa realidad a medio camino entre la inflación y la deflación, durante un simposio de homenaje celebrado en honor de su predecesor, Christian Noyer, retirado tras doce años al frente de la institución.
La baja rentabilidad del dinero, con tipos incluso negativos en países como Dinamarca, genera un exceso de liquidez que lleva a los inversores a buscar refugios que pueden crear nuevas burbujas financieras, advirtió.
"No sabemos mucho de las burbujas, pero sabemos que los tipos bajos de interés conducen a ellas", apuntó Jean Tirole, premio Nobel y profesor titular de la Escuela de Economía de Toulouse (Francia).
Hubo consenso en que la solución no pasa por elevar el objetivo de los bancos centrales de mantener la inflación cercana al 2 %, de forma que la respuesta adecuada "dependerá de las políticas, no sólo monetarias o fiscales, sino también estructurales y macroeconómicas", dijo el vicepresidente de la Reserva Federal estadounidense, Stanley Ficher.
Entre los más seguidos
La cuenta de Twitter del Banco de México (Banxico) ocupa el segundo lugar en el número de seguidores entre los principales bancos centrales del mundo.
De acuerdo con el portal Bloomberg Business, la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos reportó hasta octubre pasado 304 mil seguidores, mientras que la institución mexicana alcanzó 301 mil.
El tercer sitio lo ocupa el Banco Central Europeo (BCE) y el cuarto lugar el Banco de Indonesia, debido a que la tasa de interés en los bancos centrales cobra importancia entre los usuarios, según un estudio.
En total, el número de personas que siguen a las 10 principales autoridades monetarias en la red social es de dos millones hasta mediados del décimo mes del año pasado, cantidad mínima si se compara con cuentas de políticos como el presidente estadounidense Barack Obama, que tiene más de 68 millones.