Fue durante una conferencia de prensa previa a iniciar con sus shows en el Auditorio Nacional, donde el grupo expresó que no necesitaban escolta ni tomar alguna medida de seguridad. (EL UNIVERSAL)
Apenas el pasado jueves 30 de junio, la Banda MS presumía no tener miedo a la violencia en México, y dos días después, Alan Ramírez, vocalista de la agrupación fue baleado tras un concierto en la Ciudad de México.
Fue durante una conferencia de prensa previa a iniciar con sus shows en el Auditorio Nacional, donde el grupo expresó que no necesitaban escolta ni tomar alguna medida de seguridad.
Oswalo Silvas, integrante de la banda, destacó que tienen las puertas abiertas en cualquier plaza donde deseen presentarse, a diferencia de otros exponentes del género regional mexicano, debido a que son una agrupación muy “familiar”.
“Afortunadamente hemos sido cuidadosos de crecer sanamente y no tenemos la puerta cerrada en ninguna ciudad de la República, trabajamos con toda tranquilidad. Creo que eso se debe a nuestra música que es más genérica, está dirigida a todo público con respeto y no se trata de ofender a nadie, ni a un sector ni a otro”, aseguró.
En contraste a estas declaraciones, la madrugada de este sábado, su vocalista Alan Ramírez fue víctima de un ataque con arma de fuego a las afueras de un hotel en Polanco.
En hechos que han no están claros, un sujeto lesionó al cantante al arribar al hotel Presidente InterContinental después de ofrecer su segundo concierto en el “Coloso de Reforma”.
El Ministerio Público de la Coordinación Territorial MH2, con sede en el Hospital de la Cruz Roja de Polanco, ya inició una carpeta de investigación por el delito de lesiones dolosas en contra del artista, que según sus compañeros, se encuentra recuperándose.