En este mes, la mayoría de las cabras ya están preñadas, y las más próximas a parir son las que se cargaron a finales de mayo o principios de junio, por lo cual debemos de estar al pendiente de ese acontecimiento.
Al aproximarse el momento del parto, la cabra muestra síntomas muy claros. Primero, hay una rápida dilatación de la ubre con endurecimiento en los pezones. Luego, el apetito disminuye o hay una preferencia acentuada por ciertos alimentos.
Una disminución de la temperatura rectal de entre 1.5 y 2.5 °C es la indicación segura de que el parto tendrá lugar en las 12 a 24 horas siguientes, así como el aflojamiento de los músculos alrededor de la cola y la aparición de áreas hundidas a cada lado de la base de la cola. La vulva aumenta de tamaño y hay descarga de una mucosa por la vagina. A medida que el esfuerzo y los dolores del parto se hacen mas pronunciados, en algunas ocasiones la cabra permanece acostada.
Presentación normal. En una presentación normal del cabrito, lo primero es la bolsa de agua que contiene el líquido alantóico. Poco después la bolsa se rompe y a menudo la cabra se levanta para lamer ese líquido, al parecer eso le despierta el instinto materno.
Cuando la cabra da a luz en el campo, puede dar de mamar a otros cabritos. Eso significa que su cría podría dejar de recibir el primer calostro (más rico). Esto es una de las razones por la cual se recomienda dejar a las cabras próximas al parto en el corral, además del acarreo de las crías al corral. Unos 45 minutos después de romperse la bolsa, deben aparecer las patas delanteras del cabrito, en seguida aparece la cabeza del cabrito, después aparecen los hombros y el resto del cuerpo. En un parto normal el caprinocultor puede ayudar a la cabra tirando suavemente de las patas de la cría en dirección del corvejón de la cabra y, tan pronto como salga la cabeza de la cría limpiarle la mucosa de la boca y la nariz para facilitar la respiración.
Presentación anormal. Si las patas delanteras del cabrito no aparecen ni cambian de posición unos 45 minutos después que se rompió la bolsa, es necesario examinar la posición de la cría. Primero, lavarse las manos y los antebrazos, para verificar si la cabeza de la cría está en la posición adecuada.
Las tres complicaciones más comunes son
1.- la cría está ubicada al revés, en ese caso se siente la cola pero no la cabeza;
2.- la cabeza está doblada;
3.- una de las patas está doblada.
En los últimos casos la cría debe de empujarse de vuelta al útero para colocarse la cabeza o la pata en la posición debida.
Hay que tener mucho cuidado de la ayuda inexperta o mal informada, los cuales sugiere tirar de las patas de la cría, lo que en varias ocasiones puede causar daños graves a la madre debidos a hemorragias internas.
Algunas veces la placenta sale inmediatamente después del cabrito, pero si no ocurre, hay que tratar de expulsarla lo mas pronto posible, antes de las 24 horas. Su retención crea una condición septicémica en el aparato reproductor.
La mayoría de las infecciones genitales de las cabras, se deben al mal cuidado o a la falta de higiene durante el parto.
Un buen caprinocultor no debe dejar nada al azar cuando se trata de un animal valioso como lo es una cabra, pero cuando tenga dudas y antes que sea muy tarde debe consultar al Médico Veterinario.
En otro aspecto, a nombre de este importante sector Agropecuario, va nuestro reconocimiento al Ing. Gustavo Vargas Muñoz, Encargado de la Coordinación Región Lagunera de la Secretaria de Desarrollo Rural del Gobierno del Estado de Coahuila, la cual se localiza en la calle Degollado No. 295 sur. En esta ciudad de torreón Coahuila. Quien siempre esta dispuesto a escuchar, orientar y realizarle los tramites pertinentes a los productores Agropecuarios de esta Región Lagunera de Coahuila.
Siga con ese dinamismo y empeño Ingeniero Gustavo, siguiendo las indicaciones del Ing. Alfio Vega y del Gobernador Rubén Moreira.
