Gran trabajo tuvo la defensiva de los Bills de Búffalo.
Búffalo se dio un banquete con los fallos de Patriots, propinándole a Nueva Inglaterra su primera derrota sin que pudiesen marcar un solo punto en el Gillette Stadium al ganar 16-0.
Fue la primera derrota de los Patriots, que disputó su último partido antes que su estelar quarterback Tom Brady pueda volver a jugar tras cumplir una suspensión de cuatro fechas por el "Deflategate".
Los Patriots, que se mudaron al Gillette Stadium en 2002, no acababan blanqueados en casa desde un 6-0 ante los Jets de Nueva York en 1993 en el Foxboro Stadium.
Tyrod Taylor conectó con LeSean McCoy para un pase de touchdown de siete yardas en el primer cuarto, mientras que Dan Carpenter pateó tres goles de campo para Búffalo.
Fue apenas el segundo triunfo de Búffalo en sus últimas 16 visitas a Foxborough.
Al incluir su ciclo al mando de los Jets, el entrenador de los Bills Rex Ryan cantó victoria por primera vez de visita contra el equipo de Bill Belichick en ocho intentos de temporada regular.
"Dios, se siente bien ganar finalmente aquí... es satisfactorio", reconoció Ryan. "Pero enfrentémoslo: les faltaba un jugador".
Luego de sufrir para mantener las series ofensivas y encontrar un balance entre el juego aéreo y el terrestre, Taylor lució preciso. Finalizó con 27 pases completos en 39 intentos para 246 yardas y comandó a su ofensiva a convertir siete de 15 terceras oportunidades.
De titular por segundo partido seguido en lugar de Jimmy Garoppolo, Brissett no pudo sostener el buen desempeño que tuvo en la victoria 27-0 ante Houston.
Los Patriots solo ingresaron a territorio de Búffalo en cuatro ocasiones.
"Nada fue suficientemente bueno", admitió el coach Bill Belichick. "En cualquier posición, en cualquier fase del juego".
