Si para los automovilistas es agobiante esperar minutos o hasta horas el paso del tren, ciudadanos de a pie enfrentan toda clase de peripecias para llegar a sus destinos.
En Gómez Palacio el ferrocarril mantiene dividida a la ciudad y esto lo saben bien los habitantes de Santa Rosa, Cinco de Mayo, Rubén Jaramillo y otras colonias ubicadas en el otro extremo de las vías, quienes casi a diario deben padecer las consecuencias.
Ayer no fue la excepción, luego de que por casi una hora permaneció detenido sobre la vía que divide la zona Centro de estas colonias y con ello, se paralizaron las actividades de cientos de personas.
Mujeres con dos bebés en brazos, se vieron forzadas a pedirle a un empleado de seguridad ferroviaria que los cargara y pasara del otro lado de los vagones a una persona que ya las esperaba.
"Nos bajamos del taxi porque hacía mucho calor y llevaba mucho tiempo detenido, aquí paradas no podemos estar con los bebés porque les está dando el Sol directo", dijo la madre de Sarahí y abuela de los dos pequeños.
Sarahí, una de las jóvenes madres señaló que esperaron a bordo del taxi más de media hora, pero prefirieron bajarse y caminar para llegar a su domicilio en la colonia Santa Rosa.
Otras personas entre jóvenes, mujeres y adultos mayores se desesperaron y brincaron pese al riesgo de que el tren se moviera de un momento a otro; algunos lo hicieron con todo y bicicletas que tuvieron que subirse a los hombros.
Algunos más aguardaban bajo una sombra a que el tren abriera el paso y cruzar las vías a la altura de la calle Zaragoza, donde se supone que la empresa Ferromex construiría un acceso peatonal seguro desde hace años.
Mientras, en el cruce vehicular por las calles Constitución y 20 de Noviembre por la avenida Enrique Unzueta, las filas de vehículos se hicieron largas hasta que el tren reanudó su marcha.
Ayer, en sesión de Cabildo, se aprobó una propuesta para que una comisión de regidores acuda a la ciudad de Monterrey, donde se ubican las oficinas de la empresa, a fin de entrevistarse con directivos y buscar una solución a éste y otros problemas.
El regidor Francisco Raúl Ramírez dijo que una de las prioridades es la construcción del paso peatonal y para ciclistas sobre el desnivel 11-40 del bulevar Miguel Alemán, donde ya han ocurrido accidentes por la falta de este acceso que debió construirse hace tres años.
Peripecias. Mujeres tuvieron que pedirle a un empleado de seguridad ferroviaria que cruzara a dos bebés del otro lado de la vía para no seguirlos exponiendo al Sol y al calor mientras esperaban. (EL SIGLO DE TORREÓN)