El contrato para la compra-venta del agua tratada de la planta Oriente está en vías de cancelación, pues incumple con la legalidad al no haber sido autorizado por el Congreso del Estado de Durango, pese a que se celebró por un periodo de 30 años.
El encargado de las finanzas en el municipio de Gómez Palacio, Óscar García informó que el área jurídica está haciendo todo lo necesario para dejar sin efecto dicho contrato, con lo que el agricultor José Luis Padilla dejará de recibir un suministro de 80 litros por segundo, casi toda el agua que produce la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR) Oriente.
Señaló que será la misma Dirección Jurídica la que en un corto plazo, determinará el monto del daño patrimonial que por este motivo se ha ocasionado.