Según los informes de la Fiscalía, José Fortino se hizo acompañar de dos de sus hermanos, un amigo y otro familiar, para secuestrar a un septuagenario.
En el estado de Texas, Estados Unidos, hacía su vida el señor José Fortino Rivera Méndez, de 39 años de edad, pensando que el delito de secuestro y homicidio que había cometido en el estado de Durango había quedado en el olvido, sin contar con que los agentes de la DEI le seguían la pista muy de cerca, y con el apoyo de las autoridades norteamericanas lo capturarían.
El mencionado fue trasladado desde la Unión Americana a la ciudad de Durango para ser puesto a disposición del juez que lo requería a través de una orden de aprehensión por el delito de secuestro, en agravio de un señor de 76 años de edad, perpetrado en noviembre de 2013.