El presidente de Sudán del Sur, Salva Kiir, declaró ayer un alto el fuego unilateral y cese de las hostilidades en esta capital, luego de cinco días de combates entre sus tropas y las leales al vicepresidente, Riek Machar, que dejaron unos 300 muertos.
El cese al fuego fue anunciado por el portavoz presidencial Ateny Wek Ateny, luego de una quinta jornada de combates entre tropas leales al presidente Kiir y a Machar, en medio de los llamados de paz de la comunidad internacional.
Según el vocero oficial de la Presidencia, el mandatario ordenó a las tropas del gobierno "desengancharse" de la lucha contra las fuerzas rivales de Machar, a quien instó a hacer los mismo.