La vigilancia en el área del Cefereso No. 9 es extrema. (AP)
En su nueva prisión en Ciudad Juárez, Joaquín Guzmán Loera se encuentra aislado y con sólo una visita por semana, después de haber dejado el penal del Altiplano.
Andrés Granados Flores, abogado del narcotraficante, dijo al Diario de Juárez, que el pasado domingo pudo encontrarse con su cliente y ayer que volvió al penal no pudo hacerlo ya que se le impidió el acceso.
“Simplemente me dijeron que no podía pasar”, señaló quien forma parte del grupo de litigantes que lleva la defensa de "El Chapo".
El comisionado del Órgano Administrativo Desconcentrado de Prevención y Readaptación Social (OADPRS),de la Secretaría de Gobernación, Eduardo Guerrero Durán, dio a conocer que la defensa del capo tendrá restricciones, con sólo una visita por semana como una medida de seguridad, además informó que hasta el momento, el líder del cártel de Sinaloa no ha visto a su familia en el Cefereso No. 9 de Ciudad Juárez.
El funcionario aseguró que el traslado del narcotraficante se realizó con pleno apego a los derechos humanos del interno y el sábado por la mañana se le informó de este movimiento a abogados y familiares.
Ante el ingreso del "Chapo" a este reclusorio, la seguridad en el área es extrema, ya que todo vehículo y persona que ingresa y sale del lugar son sometidos a intensas inspecciones, además de que la vigilancia se extendió hasta la carretera Panaméricana del kilómetro 20 hasta Samalayuca, en la que participan elementos de la Policía Federal y del Ejército Mexicano.